Eres mi primer TODO

Capítulo 3

Después de pasar todo el fin de semana y parte del lunes en la cama gracias al resfriado que atrape por caer a la piscina, al fin pude salir y terminar de recorrer el vecindario, que era mucho más grande de lo que yo pensaba, con su área recreativa y demás, y por suerte no me encontré con James en el camino

Me estaba columpiando cuando por despistada me caí, gracias a Dios y lo único que me hice fue un pequeño raspón en la rodilla, no vuelvo a usar falda en mi vida

- ¿Qué te paso? - pregunto Lauren cuando llegue a la casa

- Nada grave, solo me caí del columpio - siempre tuve resistencia a los golpes, no era como la mayoría de las niñitas que lloraban por cualquier cosita, yo era de las que armaban berrinches para conseguir lo que quería, pero no lloraba cuando me caía, raspaba, pegada o cualquier cosa típica de mi edad

- Nada grave, solo te enterraste una piedra en la rodilla - respondió molesta, mire hacia mi rodilla y era cierto ¿Debería dolerme? Porque ciertamente no lo hace

- Ven te sanare - me llevo a la cocina y me sentó en la encimera, saco el botiquín y empezó a sacar la pequeña roca incrustada, provocando que saliera más sangre, luego agarro un algodón con alcohol y lo paso por mi herida

- ¡Ahh! - grite, ardía demasiado

- Ya pasara nena - me tranquilizo Lauren, luego de desinfectar mi rodilla la vendo un poco y me pude ir a mi habitación

Estaba en mi cuarto escribiendo en mi cuaderno cuando tocan a mi puerta

- Pase - dije distraídamente pues estaba concentrada en mi historia

- Hola Theressa - esa voz, me voltee de mi asiento y lo vi allí de pie en mi puerta

- ¿Qué haces aquí? - quizás fui un poco grosera, pero no tenía ganas de verlo

- Oye no te quiero molestar, yo solo quiero hacer las paces contigo - se acercó hasta donde yo estaba - Hey ¿Qué te paso allí? - pregunto al ver mi rodilla

- Nada, solo me caí del columpio - dije restándole importancia

- Bueno entonces ¿Hacemos las paces? - dios pero que niño tan insistente

- Mira James no sigo molesta contigo, solo no eres el tipo de chico que quisiera como amigo - dije tratando de que se marchara rápido, ciertamente su presencia me ponía de mal humor, y curiosamente cuando estaba cerca siempre pasaba algo... malo

- Entiendo, empezamos con el pie izquierdo y no me quieres cerca - asentí, podía ser listo cuando se lo proponía - aunque creo que podríamos empezar de nuevo - dijo tendiéndome la mano

- Soy Theressa Carter - dije agarrando su mano desconfiada, pero pensando que así se marcharía mas rápido

- James Hunter - me dio un apretón

- Muy bien ya nos conocemos, ya empezamos de nuevo, ya te puedes ir para que yo pueda seguir escribien... - me calle al ver que le estaba revelando mi afición a la escritura

- ¿Qué haces? - pregunto interesado tratando de ver tras de mi

- Nada que le importe a alguien que apenas conozco - esta no era yo, por lo general no era tan grosera

- Veo que sigues teniendo un mal concepto de mí, pero hare que cambies de opinión - dijo levantándose y acercándose mucho a mi

- Te creeré cuando lo vea, ahora adiós - dije retrocediendo instintivamente

- No me iré hasta que me digas que estás haciendo - dios pero que chico tan terco

- Pues ponte cómodo entonces pues no pienso decirte - se sentó en mi cama