dieciséis

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Mayra suspiró profundamente, buscando entre la multitud de gente que pasaba a través de las puertas del hotel. Ella desvió la mirada hacia el coche en el que su madre se sentó, tecleando en su móvil.

Bien, mamá, Mayra pensó. ¿Seguro notaría sí me secuestraran o mataran ahora mismo? Si, un 10/10 criando hijos.

—Dios, ¿dónde diablos estás? —Murmuró Mayra, mirando el reloj por enésima vez. Mayra odiaba esperar, y ya iban 34 minutos de retraso. Otra ola de gente inundó la puerta, mientras Mayra escaneaba sus rostros.

Baekhyun no estaba allí.

Cansada de esperar, sacó su móvil y marcó el número de Baekhyun. Luego de cuatro pítidos, lo cogió.

  —Hey —respondió Baekhyun, con voz de pito.

—Oye —Mayra entrecerró los ojos— ¿Dónde diablos estás, idiota estúpido?

 —No hay necesidad de ser tan grosera Mayra —dijo Baekhyun, y casi podía oír su risa.

 —Puedo ser grosera cuando me dé la real gana. ¿Ahora dónde diablos estás?

 —Date la vuelta—dijo Baekhyun. Y así lo hizo. Pero Baekhyun no estaba detrás de ella.

 —¿Qué demonios, Baekhyun te juro que... —fue interrumpida por el sonido del móvil, Bakhyun le había colgado.

Echando humo, Mayra volvió a buscar el contacto de Baekhyun, una vez más, y justo cuando estaba a punto de llamar, alguien pronunció su nombre.

 —¿Te dije que dieras la vuelta, no?

Enojada, Mayra giró sobre sus talones, lista para gritar a Baekhyun en la cara, que no estaba para sus juegos. Pero entonces, cuando ella lo miró, simplemente no podía. Quiero decir, ¿quién podría?

Y ahí estaba Baekhyun, en una rodilla con un ramo de rosas, chocolate, y esa sonrisa descarada.

—¿Qué es esto?

—Mi forma de pedirte disculpas por actuar como un idiota y gracias por seguir hablando conmigo.

—No voy a follar contigo solo por esto.

—No creí que lo harías—Mayra levantó una ceja— Quiero decir, tenía la esperanza.

—Gracias, Baek —Mayra sonrió dulcemente , ignorando su comentario. En realidad nadie había hecho algo como esto por ella, por lo que era una especie de calentamiento al corazón.

—Cualquier cosa por ti, bebé—Baekhyun hizo un guiño y Mayra aguantó un poco su respiración porque joder... ya lo tenía frente a ella. Tenía a Baekhyun llamándole bebé.

Sonrió. Baekhyun se levanto de su rodilla y sacudió el polvo de ésta, y luego le entregó las rosas y chocolate para Mayra (el se estaba cansando de llevarlo en la mano).

—Sabes —Baekhyun comenzó, rompiéndo el silencio— Te iba a contar una broma sobre mi polla, pero es muy rápido —dijo, y guiñó un ojo a Mayra, esperándo que de alguna manera le gustara su perversidad (lo hizo).

—¿Oh en serio? —preguntó Mayra— Yo te diría uno de mi coño, pero no será.

—Suaves —dijo Baekhyun, asintiendo satisfecho— Apuesto a que esas dos bebés son suavecitas.

Mayra no sabía realmente lo que estaba hablando, pero conociendo a Baekhyun, no hablaría de su pelo.

—Vete a la mierda.

—Preferiría que lo hagas por mi—dijo, sonríendo ampliamente y guiñandole un ojo. Mayra trató de luchar contra contra un rubor, mirando a otro lado, tratándo de ocultarlo.

—Hey, May —dijo Baekhyun, Mayra le devolvió la mirdada— ¿Vives en una granja de pollos? Porque ¿segura sabes cuidar pollas?

—Jesús Cristo de mierda, Baek. Te odio tanto —dijo, poniendo los ojos. No quería esto ahora mismo.

—Mi polla acaba de morir, ¿puedo enterrarla en tu culo?

Mayra arrugó la nariz. Ni siquiera podía imaginarse a sí misma teniendo anal.

—No.

—Oh, cariño, sólo habrán siete planetas luego de que destruya tu Urano —orgulloso de sus palabras, a pesar de que lo había buscado en Google cuando venía al hotel, esperaba que éstas funcionasen.

—Solo habrán seis mil millones, novecientos noventa y nueve personas que abandonarán después de que te destruya —Mayra puso su mejor sonrisa falsa, y Baekhyun casi tuvo que dar unos pasos hacia atrás.

—Sé que me quieres —dijo, aunque en realidad, solo estaba tratando de convencerse a sí mismo.

—Para irme, sí.

—¿En serio? —dijo con el ceño fruncido y una mirada de dolor, mientras su voz se hacía pequeña y ¡Dios!, Mayra quería romper en llanto. No, se dijo. Él sólo está actuado.

—Sí vas actuar así, entonces si. No sé, no pensé que eras en realidad así, wow, realmente pensé que no eras un cerdo en la vida real—Mayra niega con la cabeza y se muerde el labio, empujando a Baekhyun mientras deja las rosas en sus manos (quedándose ella con el chocolate, realmente quería el chocolate)

—Mayra, espera —Baekhyun rogó, dándose la vuelta Mayra siguió su camino, ignorando al chico— A la mierda esto —Murmuró Baekhyun, corrió tras ella, cuando la alcanzó, se trasladó delante de ella, negándole el paso.

—¿Qué quieres Baekhyun? —preguntó con amargura.

—Yo sólo, mira yo, —Baekhyun tartamudeó, sin saber que decir. Gran plan, compañero, pensó.— Yo sólo, no sé cómo hablar con chicas guapas.

Mayra levantó una ceja. —Sí, está bien.

—No, realmente, en serio, no lo hagas. Hablé de esa manera porque pensé que te guataba, quiero decir, así es como empezamos y tú continuaste hablando conmigo, y mira donde estamos ahora. No pensé que reaccionrías así, lo siento.

—Oh —dijo Mayra, sintiendose mal repentinamente, muy culpable— Lo siento por exagerar.

—Está bien —dijo Baekhyun, sonríendo dulcemente. Mayra sonrió también.

—Oh, espera, hay una cosa más, —dijo Baekhyun y sonrió con una sonrisa, mostrándo todos sus dientes y con un brillo en los ojos— Date la vuelta.

Vacilante, Mayra aceptó las rosas de nuevo, y entonces se lo dijo. Esperó un rato, y estaba a punto de dar la vuelta otra vez, cuando un brazo le tapó la vista y sintió algo frio tocar su pecho. Luego oyó un clic, y miró hacia abajo para ver un hermoso colgante alrededor de su cuello.

—Baekhyun —le costaba respirar— Esto es hermoso y-yo-

—¿Tú qué?—pregunto Baekhyun, sonriendo descaradamente viendo como Mayra daba la vuelta.

—Ahora realmente me siento como una mierda, porque no te he traido nada.

—Oh, cariño, esto son los mejores regalos que podrías traer —dijo Baekhyun, y se lamió los labios mientras levantaba sus manos. Mayra estaba confundida acerca de lo que estaba hablando, siguió su mirada hasta que lo pillo mirándole los pechos.

—Vete a la mierda, Baek.

—Son aún más perfecto de lo que me lo imaginaba —Baekhyun sonrió, realmente, realmente quería tocar.

—Mira, sí te enviaba una foto en aquel entonces, no me daría el placer de ver tu cara de sorpresa.

—No se puede discutir con eso —Baekhyun asintió de acuerdo— Sin embargo, si hubiera conseguido una foto, no tendría una erección justo en este momento. (En realidad no, por alguna razón solo le gustaba actuar como un hijo de puta caliente).

—Lo que sea.

+++

Fin

  


Snapchat ➳ BaekhyunWhere stories live. Discover now