CALIOPE

En el presente, en el principio

( en la foto Liam) 

Liam

Me mire en el espejo, hacia mucho que no lo hacía, nunca me gusto lo que vi. Incluso mi rostro, ese rostro por el que las mujeres morían, sobornaban o rogaban por tocar nunca me importo.

Ellas no importaban, no me conocían, no sabían nada de mí, de mi historia, de mi verdadero yo.

Suspire cansado. Acaricie la fotografía de mis padres. Todo el dinero, la fama, las fans, las mujeres, todo eso lo daría por volver a abrazarlos. Por volver a tenerlos conmigo.

Salí para ir a la biblioteca. No pude evitar notar la revolución que había en la sala y me desvié a la sala. Olivia estaba gritándole a Ester mi última asistente, había resultado inútil como todas las demás. Vistiéndose con ropa diminuta para provocarme. Insinuándoseme a niveles desagradables. Ni si quiera sabia porque había dejado que Olivia la eligiera. Las últimas cinco asistentes elegidas por ella eran iguales, inútiles, sin valores morales, sin conocimientos literarios.

Olivia cayo sus gritos cuando entre, Ester estaba pálida y me miraba con cara de espanto. Entonces mire la televisión prendida sobre la pared. Mi foto. Mi puta foto en el club al que deje que Olivia me convenciera de ir jurando que nadie me reconocería.

_ es la última vez que dejo que contrates a mi asistente Olivia_ dije molesto_ Ester, a la biblioteca ahora_ dije con peligrosa calma.

Entre sin esperar a que me siguiera. Me senté en mi escritorio. Llene un cheque por la cantidad de semanas que había estado trabajando para mí más algo más. Ella entro caminando seductoramente y sentó en el escritorio frente a mí cruzando las piernas mostrándome sus bragas apropósito. Si quería seducirme tuvo el efecto contrario.

Le extendí el cheque y dije con calma

_ Estas despedida_ me levante y me fui.

En mi habitación llame a mi agente. Era la única en quien confiaba.

Calíope

Puse la agenda sobre el escritorio de Fanny. Hoy era el último di que trabajaba para ella. Había decidido jubilarse después de 30 años como agente literaria y había aprendido mucho de ella tanto que ya tenía mi título en inglés y la había ayudado muchas veces en su descubrimiento de autores nuevos.

Sin embargo al que más admiraba era a Liam Bender, había sido descubierto con su primera obra en wattpad y ella lo había atraído respetando su pedido de absoluto anonimato con respecto a su imagen.

Los primeros tres libros de romances eróticos con tintes bdsm fueron un éxito pero no hubo presencia de el por ningún lado físicamente, y los libros firmados eran enviados directamente desde su casa por alguna de sus muchas asistentes personales.

Ninguna duraba demasiado tiempo, al parecer era exigente, detallista y mal humorado. Sin embargo ese anonimato tan bien cuidado por Fanny había sido dado por tierra cuando una asistente personal filtro una foto de Liam en una disco de moda. Físicamente era un hombre muy guapo, 1.90, ojos azules zafiro, una boca deliciosa y sensual. El pelo era largo y rizado color castaño claro desordenado. Podría haber sido modelo tranquilamente pero mantenía su imagen celosamente guardada.

La asistente fue despedida por supuesto pero el daño ya estaba hecho. Sin embargo a pesar de todo sus ventas se dispararon y la siguiente saga de libros sobre amos del bdsm y sus historias había sido un éxito tan grande que ya iban por la quinta reedición. Sus escritos eran oscuros, provocativos, sensuales. Leerlos me llevaba a un mundo oscuro y me excitaban.