Lo que debí decirte antes de que te marcharas [Lésbico]

9. Insomnio

No sabes cuántas veces me pregunto si acaso yo soy la única idiota que te recuerda. No puedo, simplemente no puedo seguir con mi vida sin ti. Juro que me odio a mí misma por eso, porque yo sola me lo busqué. Yo fui y soy quien te ha dejado ir siempre.

Aun me quieres?

No sé qué será de mí, lo único que sé es que en verdad quiero tenerte de nuevo en mi vida. Pero me pregunto para qué, si luego voy a querer alejarte.

No sabes cuánto me duele alejarte.

Te dije muchas veces que te explicaría cuáles son mis razones para no poder ser feliz a tu lado, para no poder amarte completamente. Creo que hoy es el día.

Tenía 17 años y aún así podía jurar que me casaría contigo. Te amaba más que a nadie en este mundo, era la mujer más feliz a tu lado y aunque no todo era sonrisas, yo transcurría los que hoy serían los mejores días de mi vida.

Pero un día, algo salió mal.

Nos vieron.

Se enteraron.

Llamaron a nuestras madres.

Nunca he llorado tanto como ese día, podía sentir cómo mi alma iba rompiéndose junto a todo lo que me quedaba.

Mi madre desde que se enteró no dejó de llorar y gritándome me hizo jurarle que no pasaba nada entre nosotras. Se lo juré.

Cuando llegó mi padre, la cosas empeoraron. Él solo intentaba calmar a mi madre y solo decía que debía haber una explicación para todo esto.

"No he criado a una hija durante 17 años para esto, yo me muero si tengo una hija lesbiana". Esas fueron las palabras de mi madre cuando creía que yo no la escuchaba.

Me obligaron a dejarte.

Ya no me dejaban hablarte.

Y me prometí intentarlo.

Creí que los amaba más a ellos que a ti.

Ni siquiera puedo recordar ese día. Fue nuestra graduación y te observaba de lejos. Estabas hermosa.

Tu me pedías explicaciones, pero yo no podía dártelas, me dolía.

Nunca había visto así a mis padres y no podía permitirme que volviese a suceder, es por eso que me alejé.

Te dejé ir tan cobardemente. Pero no dejé de amarte. Nunca tuve tiempo para decirte adiós. No me permitiría decirte ese adiós.

Así que continúe con mi vida, con el recuerdo constante de ti, amándote como si nada hubiese pasado, pero en secreto.

No he mirado a otra persona desde ese entonces, muchos me preguntan por qué soy tan dura, por qué jamás trato bien a un hombre cuando intenta coquetear. Es por ti.

Siento que te estoy engañando cuando veo a alguien más.

No puedo olvidarte por más que lo intente.

Y esto me está matando.