CAP 9

140 9 0
                                        

Narrador

La música volvió a subir, como si el DJ intentara rescatar el ambiente, pero ya era tarde. La fiesta había muerto. En su lugar quedaba una escena rota, como un cristal estallado en mil pedazos.

Yan
Me quedé ahí, respirando con dificultad, sintiendo el ardor del golpe en la cara y algo peor quemándome por dentro. No era la rabia. Era la culpa.
TN se había ido… y con ella, todo lo que creí que podía arreglar.

—Mierda… —susurré, y me solté de los panas que me sujetaban.

Roa
Tenía sangre en el labio y el corazón deshecho. Verla irse así, ver cómo tiraba el collar al piso… fue como si me arrancaran algo por dentro. Pero más que dolor, sentía vacío.
Todo por no haberla escuchado. Por dar por hecho que siempre iba a estar ahí, esperándome.

—Ya no hay nada que decir —dije, mirando al piso. Me pasé la mano por la boca, escupí sangre y salí del lugar sin mirar atrás.

Hades
Los vi a los dos irse, primero TN, luego Roa. Y Yan… se quedó. Quieto. Como si estuviera enfrentando sus propios demonios.
No iba a fingir que no me dolía verla así, hecha pedazos. Pero tal vez esto tenía que pasar. Tal vez así ella también se encontraba a sí misma.

—¿Y ahora qué? —le dije a Yan, sin sarcasmo, sin rabia. Solo con cansancio.

Yan
—Ahora… no sé. Tal vez ahora toca crecer. Aunque duela.

---

Días después…

TN
Me fui a casa de una prima lejos de todo. Apagué el celular, cerré redes, me desconecté del mundo. Nadie entendía lo rota que me sentía. Todos hablando de “quién se quedó con TN”, como si yo fuera una prenda que se reparte después de una guerra.

Pero yo… yo solo quería paz.

Una noche, mientras veía el atardecer, entendí que necesitaba empezar por mí. Dejar de ser el centro del drama, de cargar secretos que no eran míos, de darle mi amor a quien no sabía cuidarlo.

Así que me senté, escribí dos cartas. Una para Roa. Otra para Yan. Y las envié sin esperar respuesta.

---

Carta para Roa

Roa,

No sé cómo empezar esto sin que suene a reproche, pero tampoco puedo fingir que no duele.

Te quise, con todo lo bueno y todo lo malo que traías. Aguanté más de lo que debía, callé más de lo que merecía. Siempre supe que tenías tus batallas, pero nunca pensé que me tocaría pelear sola mientras tú te alejabas más y más.

No te escribo para pedir explicaciones ni para que vuelvas. Te escribo para soltar.

Te amé, Roa. Pero también me olvidé de mí en el proceso. Me perdí esperando que tú cambiaras, que vieras el daño que hacías cuando callabas, cuando gritabas, cuando dabas por hecho que iba a seguir ahí… sin importar qué.

Gracias por los momentos bonitos. Por lo bueno que sí tuvimos. Pero esto es un adiós. No desde el rencor, sino desde la libertad.

Cuídate. De verdad.

—TN

---

Carta para Yan

Yan,

Lo nuestro fue un error… y al mismo tiempo, fue la única verdad que sentí en medio de tanto caos.

No te culpo. No del todo. Ambos sabíamos que no estábamos haciendo las cosas bien. Pero tú llegaste justo cuando más rota estaba, y lo confundimos todo.

A veces creo que solo querías lo que no era tuyo. Otras veces, creo que viste en mí algo que ni yo veía. Pero al final, terminamos lastimando a todos… incluso a nosotros mismos.

No te odio, Yan. Pero tampoco te idealizo ya. Solo quiero que sepas que entendí que el amor no puede construirse sobre mentiras, sobre deseos a medias o sobre heridas abiertas.

Te deseo luz. Te deseo calma. Y ojalá un día entiendas que no todo se arregla con una sonrisa o con una promesa en la madrugada.

No me busques. No por ahora. Necesito reencontrarme lejos de todo lo que fuimos.

Con todo lo que fuimos y no supimos ser,

—TN

El Peor Mejor Error Yan Block 💕Where stories live. Discover now