FRAGILE - YT

02

Miró por enésima vez la hora en su celular y ya pasaban las doce de la noche, la madre de aquella niña no daba señales de regresar y no tenía idea de que hacer al respecto, se negaba a despertar a taehyung pues había notado sus grandes ojeras, sus pómulos marcados y su piel muy pálida, cosa que indicaba que no había estado durmiendo por varias noches.

Sin embargo, cuando escuchó a la niña despertar y llorar al no encontrar el aroma de su madre se alarmó y no tuvo más opción que despertar al menor.

—¿Yoonie? ¿estás bien am...—taehyung cerró sus labios inmediatamente al ser consciente de lo que estaba a punto de decir y aclaró su garganta—¿Que ocurre?—trató de sonar seguro, a pesar de que su lobo no paraba de mover la cola muy contento al detectar cierto atisbo de aroma dulce proveniente del alfa, cosa que indicaba que había entendido a la perfección lo que estaba a punto de decirle.

Yoongi por su parte decidió dejar pasar aquel incidente por el bien de ambos, y sobre todo porque su preocupación radicaba en la niña que traía pegada en la espalda mojando su camisa con lágrimas, y que taehyung por supuesto al estar recién despierto no había notado. Así que simplemente le respondió señalando a la niña que tenía pegada en la espalda.

Taehyung sintió varias emociones en aquel momento, desde la preocupación hasta la ira por la madre de aquella niña que había dejado a la intemperie a su pobre hija.

...

—Amor necesito que te tranquilices y respondas a la pregunta que te hizo este señor—señaló a yoongi, que momentos antes le había preguntado donde vivía, cosa que aumentó más su llanto—solo queremos ayudarte nena.

La niña sorbió su moquillo, retiró sus lágrimas con fuerza y respondió entre hipidos—N-no tenemos —respondio finalmente—El señor que se parece a su esposo nos echó de nuestra casa—completó señalando a yoongi—pero tu esposo es menos malo ¿Verdad?

Taehyung y yoongi se miraron por un par de segundos sin saber que responder, era una situación complicada y primero debían averiguar si lo dicho por la niña era cierto para después dar con el paradero de su madre.

—¿Que haremos mientras buscamos a su madre?—consultó yoongi, viendo a la niña acurrucarse en la habitación de taehyung con una casaca suya que al parecer no quería dejar de usar por lo cálida y cómoda que era su tela.

—No podemos dejarla a su suerte hyung

Asintió estando de acuerdo con el omega—No me incomoda si se queda, pero sabes que debemos buscar ayuda, algún familiar de la enana o incluso alguna institución...—apretó los labios con incomodidad al sentir a su lobo alerta ante el cambio de aroma del moreno.

—¿Es necesario lo último?

—Es lo correcto—respondió con firmeza, cayendo rápidamente ante los ojos tristes del menor—Ahora no creo que sea el momento, no debemos agobiarla, usemos los datos que tienes de la madre para averiguar su paradero y buscar algún familiar.

Taehyung sonrió contento ante su respuesta, no quería que la niña se agobiara y al parecer el alfa lo entendió a la perfección, cosa que siempre hacía a pesar de que su lazo por la marca ya no estuviese tan presente.

El alfa miro de soslayo la manera en la que el menor tocaba con delicadeza aquella marca que en algún momento deseó que estuviera tan roja como las fresas que emanaba su aroma.

—Debemos descansar tae, mañana debemos empezar con nuestra busqueda—respondió, tomando de sorpresa a taehyung cuando posó su mano sobre la suya, justo donde se encontraba su marca.

Ambos se miraron por un largo tiempo, admirando el color de los ojos contrarios y sintiendo a sus lobos llorar ante el contacto físico, se extrañaban en demasía y sus lobos eran los únicos valientes en demostrarlo.

Taehyung fué el primero en romper el contacto y acudir rápidamente ante el llamado de la niña para que pudiesen descansar, fingió caer dormido con rapidez esperando que el aroma del alfa se marchara junto a él, pero éste solo se hizo mucho más fuerte al sentir como su cuerpo junto al de la niña eran cubiertos de mejor manera por la frazada, estaba seguro de haber sentido los dedos de yoongi trazar su rostro con delicadeza pero no podía asegurar nada ya que cayó dormido al sentir el aroma del alfa con mucha más dulzura.