El Error (Yellow Mellow y tú)

Cap 1: El comienzo de una nueva vida

Una luz clara y tenue me interrumpe mi adorable sueño. Ese que suelo tener de vez en cuando en el cuál, acabo mi carrera de fotografía con excelentes resultados y con felicitaciones por parte de mucha gente.

La luz me hace recordar que empieza un gran día y que tengo que aprovecharlo aunque sea lunes. Sí, lunes, ese día tan odiado por todo el mundo. Me levanto de la cama y me dirijo hacía la cocina a prepararme el desayuno. Me independicé cuando cumplí los 19, quiero mucho a mis padres, pero cuando tenía 12 años, decidí que nada más cumplir 19 años, tendría casa propia. Y aquí estoy, haciéndome un café con leche y unas tostadas en la cocina de mi casa. Una vez finalizado de hacer mi desayuno voy hasta el salón y me siento en el sofá. Miro un rato twitter y decido poner el nuevo vídeo de Juanmasaurus. Ese chico he de decir que me gusta como youtuber, con su tono gracioso y divertido a la vez. El vídeo es una colaboración con Yellow Mellow, había visto alguno que otro con ella pero la verdad, nunca me llamó la atención ir a su canal para echar una ojeada a sus vídeos. Se titulaba Típicos Fallos En Películas. Como no, nada más empezar, ya se reían, lo cuál me contagié yo también. Al terminar el vídeo, miré la hora, tenía tiempo suficiente como para vestirme, asearme y llegar justo a tiempo a la universidad. Así que lo hice, me puse una camiseta de color blanca , un shorts azul muy clarito y unas converse del color de la camiseta. Decidí dejarme el pelo suelto, me cepillé los dientes, cogí mi mochila y salí de casa. Esperé a que llegara el autobús mientras repasaba unos apuntes de técnica y equipamiento que requería mi carrera. Al cabo de 5 minutos aparece el autobús, pago y me siento al final del todo al lado de una ventana.

***

Narra Melo:

Ya es 20 de junio, ese día tan deseado por mí, el día que me mudo a Madrid. Termino de empaquetar las cosas menos importantes como marcos, un poco de ropa y poco más. Hoy me he levantado tan entusiasmada que ni siquiera he desayunado, no me hace falta, en el camino me compraré un café y listo. Doy una vuelta por toda la casa, mirando cada esquina de ella, recordando todo lo que he vivido y todo lo que creía que viviría en ella. Pero las cosas cambian, de un momento a otro, sin que te des cuenta, lo hacen. Hace 2 meses nunca pensé en mudarme de esta casa, pero aquí me veo. El timbre de la puerta suena y abro a la persona que llevará mis cosas hacia Madrid.

- ¿Quiere que la ayude?- me pregunta el buen hombre.

- No me vendría mal- respondo sincera- puede ir cogiendo las cajas esas de allí- le señalo unas cajas más o menos pesadas y el hombre las coge con mucha facilidad, como si no pesaran ni los mas mínimo.

Creo que fueron 10 minutos los que tardamos.

-Muchas gracias- le dije- aquí tiene la dirección.

Le dí un papel, a lo que él asintió y se marchó.

Estaba esperando un taxi mientras hablaba en whatsapp con Juanma:

Juanma: ¿Qué chula, ya estás de camino?

Yo: Que va, todavía estoy esperando el taxi, mi ave de Renfe sale a las 12:00, así que llegaré justo y no tendré que esperar.

Juanma: Bueno, cuando llegues nos avisas y vamos Abi y yo a recogerte.

Yo: De acuerdo Juanmi, aióh que ya llega el taxi.

Juanma: Chau.

Cojo mis maletas y me subo.

-Hacía la estación de Renfe, por favor- le digo al taxista mientras cierro la puerta. El asiente sin más. Miro atentamente cada detalle de las preciosas calles de Barcelona. Abro la ventana y siento ese fresco del aire que hace por la mañana aunque sea verano. Estaba muy relajada con ese aire que se colaba, pero la voz del señor de delante me avisa de que ya hemos llegado. Le pago, cojo mis maletas y salgo.

Antes de entrar en la estación, me giro a ver por última vez la ciudad a la que extrañaré. Entro con paso decidido, una señorita me pide el billete y se lo doy. Los revisa con seriedad pero al devolvérmelos me sonríe. Entro en el Ave y veo que me ha tocado al lado de la ventana, me gusta, pero la idea de tener a alguien al lado y cuando necesite levantarme para ir al baño tener que molestar a la persona, me incomoda. Pero no pasa nada, quedan 5 minutos para que el tren emprenda su camino hacía otra ciudad.

Igual que yo, que emprendo viaje hacía una nueva vida.