Me desperte temprano por la mañana, era el día en el que partiría a Hogwarts para iniciar el 5º curso.
Me levante de la cama con energia de iniciar el día, y me dirigí al cuarto de baño, me duche y me vesti como muggle para no llamar la atención en la estación.
Me vesti con unos jeans negros, una blusa blanca con negro (mangas negras) y unos converse negros. Me di un último vistazo en el espejo y baje a desayunar con mis padres y hermano.
En la cocina solo encontre a mis padres. Ambos leían sus periódicos.
-Buenos días padres - dije cortésmente.
-Buenos días cariño- dijeron los dos, levantado la vista de sus periódicos.
-Y William?- dije extrañada.
-En su habitación- contesto mi madre regresando a su lectura.
Di media vuelta y subi las escaleras. Camine por algunos corredores de la mansión, con la esperanza de encontrarme a mi hermano en el camino.
Cuando llegue a su puerta, toque suavemente.
-Adelante- escuche que decia William.
Cuando entre, lo encontre terminando de meter tunicas y ropa a su baúl.
-Buenos días hermanita- dijo con tono alegre -¿que te trae a mi asombrosa habitación?- termino de decir esbozando una media sonrisa (de las que hace que las chicas de la escuela rian como tontas).
-Hola will- conteste, regresandole la sonrisa -el desayuno esta listo. - dije sentandome en el borde de su cama, observando como terminaba de empacar.
Mi hermano y yo, nos parecíamos, ambos con el cabello castaño oscuro, (casi negro), tez pálida, solo que el era alto y con ojos azules, y yo era lo contrario, era baja y mis ojos eran obscuros, fácilmente los tomaban por Negros, esa era nuestra diferencia. El es apuesto y yo...no lo se....¿también?.
-Listo- dijo triunfal cerrando su baúl, y sacandome de mis pensamientos -en que piensas ______?- preguntó, reprimiendo una sonrisa -¿chicos acaso?- esta vez rio, haciendome reir ligeramente.
-Ja, ja, que chistoso, sera mejor que te cambies, o ¿acaso piensas bajar en tu ridícula pijama de ositos Will?- dije riendo al ver la cara que puso al darse cuenta de que segia en pijama.
-Ahora vuelvo- dicho esto saco ropa del enorme armario que era toda una habitación (en todos los cuartos habia uno igual) y se metio en el cuarto de baño.
Cuando salio habian pasado 10 minuto, y vestia como muggle. Mientras esperaba me habia acostado mirando el techo, buscandole imperfecciones.
-Valla, ya era hora- no pude evitar decir -muero de hambre.
- Ya somos dos- dijo sonriente.
Cuando bajamos la mesa ya estaba puesta, y nuestros padres habian comenzado a desayunar sin nosotros.
-Buenos días padres- dijo Will, mientras yo tomaba asiento y me servia jugo.
-Buenos días hijo- lo saludaron ambos.
Todo el desayuno fue tranquilo y sin interrupciones.
Y pronto llego la hora de partir hacia la estación King Cross.
