Kilometros (Shawn Mendes y Tu) TERMINADA

Capitulo 10

Había demasiada gente ahí dentro. ______ estaba nerviosa, no conocía absolutamente a nadie. Apretó un poco más el brazo de Shawn hacia ella, a pesar de que ni siquiera a él lo conocía bien.
-Te presentaré a mi madre primero- Shawn la acercó hasta una mesa en la que estaba ella.
-Mamá- Dijo alzando la voz, ésta volteó. -Te traje a una amiga, se llama ______-. La señora se puso de pié y ______ le sonrió, estrechándole la mano.
-Mucho gusto, señora. Soy ______ O'Donnell- Dijo amablemente.
-Karen Mendes. Mucho gusto. Tu debes ser la nueva novia de mi hijo...- Dijo arqueando una ceja. Ambos rieron, nerviosos.
-No, mamá. Es mi amiga- Aclaró Shawn, tratando de no ruborizarse, valla que quisiera que lo fuera.
-Ah... bueno, perdón- Se disculpó.
-Ahora volvemos- Dijo Shawn para romper el incómodo silencio que se formó.
-Diviértanse- Les guiñó un ojo. Shawn volteó los ojos, valla que a su madre le encantaba darle burla con las chicas.
-Disculpa a mi madre... ella es así, pero es linda- Le dijo Shawn a ______. Pasaron por unas mesas, Sahwn le presentaba a cada miembro de su familia con el que se topara. Hasta llegar a la mesa central, donde se encontraba Amber, Michael, Aaron y otras cuántas personas.
-Hola viejo- Dijo Michael poniéndose de pié para saludar a Shawn.
-Qué hay cuñado- Dijo Shawn dándole un cálido abrazo, lo apreciaba. -He venido a presentarles a mi amiga- Aclaró Shawn. ______ les sonrió a todos ahí. Amber se puso de pié, ______ la observó detenidamente. «Valla, es igualita a Shawn. Su versión femenina» pensó. Era hermosa... lucía increíble en aquél vestido que se arrastraba por los suelos, blanco con bordes perfectamente cosidos. Cualquier mujer quisiera entrar en ese hermoso vestido. Ella era delgada, blanca, ojos miel. Demasiado parecido con Shawn.
-Mucho gusto, soy su hermana. Amber Mendes- Se presentó, estrechando su mano. ______ la tomó con cariño.
-Soy ______ O'Donnell, un gusto y felicidades, luces hermosa- Confesó. Ella sonrió.
-¿Tu crees? ¡Gracias!- Dijo sonriendo, le empezaba a caer bien. Michael también le estrechó su mano.
-Y yo soy el afortunado. Me llamo Michael- Sonrió. De igual forma ______ se mostró amable con el.
-¿Podemos sentarnos aquí?- Preguntó Shawn. Amber asintió al instante. Shawn apartó una silla para que ______ se sentara. Luego se sentó junto a ella, y en la silla de junto, estaba Aaron, quien saludó a ambos.
-Me alegra que hayas venido, de lo contrario Shawn tendría que bailar conmigo... ya sabes, que asco- Dijo Aaron refiriéndose a ______. Ella se rió, Shawn frunció las cejas.
-Valla que sí- Confesó Shawn. Luego el mesero llegó.
-¿Qué les traigo jóvenes?- Preguntó.
-Una margarita- Pidió Shawn.
-Igual...- Contestó ______.
-Que sean 3- Finalizó Aaron. El hombre se fue. La música en el lugar se hizo más fuerte, casi impidiendo que unos se escucharan a otros.
-¿Quieres comer?- Le preguntó Shawn a ______, apenas entendible. Ella negó.
-No tengo hambre, gracias- Dijo casi gritando. El mesero regresó y les entregó las bebidas, Aaron se puso a platicar con Michael, dándole la espalda a ellos. Shawn acercó inconcientemente su silla hacia la de ______.
-Bien, me gustaría saber más de ti...- Le dijo Shawn cerca de su oído.
-¿Qué quieres saber?- Contestó ella. Shawn la miró a los ojos.
-Todo- Dijo sonriéndole. Antes de que ella pudiera responder, se hizo presente la canción 'I'll be' de Edwin McCain.
-Espera, me encanta esa canción. ¿Quieres bailar?- Dijo Shawn poniéndose de pié, estirándole la mano. Ella no dijo nada, no se negaría, también amaba esa canción. Tomó delicadamente la mano de Shawn y éste la atrajo hasta la pista de baile. Muchas parejas ya estaban ahí, abrazados, bailando al unísono.
Shawn la tomó de la cintura y la otra mano la dejó agarrada de la de ______. Ella posicionó su mano en el hombro de Shawn. Ambos no decían nada, simplemente empezaron a moverse al ritmo de la música, de un lado a otro. En el coro, Shawn la hizo girar ligeramente. Ella sonrió. Esta vez, la atrajo más a su cuerpo, quedando totalmente pegados, sintiendo su respiración chocar. Ambos se miraron fijo a los ojos. Shawn cambió de posición, ahora con ambas manos la sujetó de la cintura, invitándola a tomarlo por el cuello. Ella lo hizo.
Se sentía extraña. El hecho de sentir las manos de Shawn acariciándole con suavidad la cintura y la espalda, la hicieron sentir bien. No lo entendía. Deseó que la canción jamás terminara. La rígida voz de Shawn rompió el silencio, segundos antes de que la melodía terminara.
-Vamos afuera- Susurró directo a su oído. A ella se le herizó la piel sentirlo tan cerca. No había sido una pregunta, si no una afirmación. La tomó de la mano y la llevó hasta el jardín, junto a la fuente de hace un rato. Ambos se sentaron en una pequeña banca que ahí se encontraba. No había nadie más.
-Ya puedes hablarme de tí- Dijo Shawn mirándola fijamente. Tenía toda su atención puesta en ella, en cada rasgo de su rostro. Le era imposible dejar de mirarla.
-Pues... no sé por donde empezar. Sólo puedo decirte que mi vida no es un cuento de hadas... no es lo que yo esperaba- Se lamentó, mirando hacia abajo.
-Aún puede serlo- Susurró Shawn. Ella intentó fingir que no escuchó eso, pero se puso algo nerviosa. Para empezar, no sabía como contarle a Shawn su arruinada vida.
-Verás... no me hablo con mi familia. Sólo para lo indispensable. Vivo con mi mejor amiga, mi madre vive en Nueva York- No sabía si era el momento indicado para contarle sobre Zac, pero Shawn la interrumpió.
-¿Por qué?- Preguntó curioso. Ella suspiró.
-Problemas...-.
-¿Tienes novio?- Preguntó.
-¿Qué? No... y no me gustaría hablar sobre eso- Rogó. Shawn asintió.
-Está bien. Sólo dime una cosa... ¿Te hizo daño, cierto?- Adivinó Shawn. No era difícil hacerlo, pues a ella claramente se le notaba en sus ojos el sufrimiento que aquél chico le había dejado. Ella simplemente asintió.
-Sé que no quieres hablar de eso, pero debes saber que si te hace algo de nuevo puedes contármelo. Soy bueno dando palizas- Dijo recordando con victoria a Liam. Ella sonrió ligeramente, se sintió alagada.
-Gracias- Respondió en voz baja. -Pero, ¿Qué me dices de ti?- Dijo esquivando el tema.
-¿De mi?- Sus ojos miel se posaron el césped. -Nada interesante... o más bien nada bueno. Mi padre y mi hermano están en la guerra desde hace un año. Vivo solo en un departamento. Trabajo en una agencia de televisión en un edificio de por aquí, me va bien pero mi jefe es un pasado. Y pues...- Hizo una pausa para mirarla- No tengo novia- Finalizó esbozando una pequeña sonrisa. Ella asintió.
-Valla, al menos tu si te llevas con tu familia, por lo que veo... me presentaste a una población entera- Dijo sonriente. Shawn se rió.
-Quería que conocieras a todos. Les has agradado, felicidades-.
______ se quedó callada. Una holeada de viento le recorrió la espalda y los brazos. Le dio frío y se tapó inconcientemente los brazos con sus manos. Shawn lo notó. Sin decirle nada, se quitó su saco y se lo colocó en la espalda.
-No, Shawn estoy bien- Dijo ella tratando de devolvérselo, pero él se negó.
-Póntelo, no quiero que te enfermes- Dijo sonriéndole de oreja a oreja. Ella se lo puso, le quedaba algo grande, pero le quitó el frío.
-Gracias- Susurró ella cruzando sus brazos. Shawn la miró. Ella también lo hizo. Se perdieron por unos segundos, Shawn posó su mirada a sus labios... «¿Me perdonará si la beso ahora? ¿Seré demasiado rápido?» pensó. Pero de pronto recordó las palabras de su padre: 'La vida es un riesgo: si nunca has fallado, nunca has vivido'. O aquél consejo valioso de su hermano Carter: 'Muchas veces en la vida, lo que nos hace falta es valor: el valor para construir nuestra felicidad'. Quizá este era uno de esos momentos, si fallaba, no importaría. Lo habría intentado, habría hecho algo que tal vez lo llevaría a la felicidad. «Soy un hombre de riesgos. Siempre lo he sido. ¿Porqué no intentarlo?».
Así que sin asimilarlo más, se acercó completamente a ella. Robándole un beso. Un beso cálido... un beso repentino... un beso placentero. La tomó de ambos costados de la cara, sin soltarla. Empezó a mover sus labios con suavidad... esperando ser correspondido. Y lo fue Shawn Mende fue correspondido. Ella estaba tan sorprendida... «Esto no está bien» lo sabía. Pero al sentir los perfectos labios de aquél hombre, no pudo resistirse. Una sensación extraña le recorrió en sus adentros, una sensación única. Shawn se acercó más a ella, le apartó un poco el saco y posicionó una de sus manos en su hombro, acariciándola con extrema suavidad. Ella le acarició inconcientemente el cabello, no quería que la soltara. Los dos estaban disfrutando ese mágico beso. Su primer beso. ¿Qué era todo esto que ambos comenzaban a sentir? ¿Amor?...