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Un cepillo pasaba sobre los rubios cabellos, el azul de sus ojos era adornado con un matador delineado y sus labios resaltados con un bálsamo rosado mientras sus manos jugueteaban nerviosamente, Sinclair era arreglada por sus amigas para el famoso Raven y por alguna razón el corazón quería darle un brinco, el calor subía a sus mejillas en donde para su fortuna llegaba a disimularse gracias a el rubor que Divina le coloco al maquillarla, mientras que Yoko se encargaba del peinarla de una manera glamurosa.

Miró el vestido, suelto de los hombros, de tonos negros, tal cual como a Addams le fascinaría, aunque si somos sinceros ella amaría cualquier prenda mientras Enid sea quien lo portase, Watson le miró, sus ojos hablaron, la calidez brindándole apoyo le dieron una calma, después de todo era la primera vez que estaba tan nerviosa en un evento como este, pues era una sensación desconocida que era tanta que simplemente le rebasaba, sus latidos resonaban, sus manos se movían con nervios y sus suspiros hablaban más que su propia boca, Merlina le provocaba tanto que simplemente no tenía palabra alguna para poder describir qué era.

—Enid, chica relájate un poco, ¿Sí?–Yoko bajo un poco sus gafas, la mirada tan intensa pero cálida buscando darle un momento de tranquilidad a su mejor amiga.–Solo es un Raven más y ya, solo iras con la psicópata de Addams, nada grave.

—Yoko.–Su tono enfatizando en un regaño que hacía a Tanaka girar los ojos tras sus gafas.–Enid, querida, se que estas nerviosa pero solo toma un respiro, la tensión se puede ver a kilómetros.–Una leve palmada de apoyo qué brindo paz a Enid.–Todo saldrá bien.

Sinclair tuvo fe en sus amigas, al menos por este día, solo por esta noche creería en sus palabras, solo seria un Raven más donde lo compartiría con su rommie, solo eso, ¿verdad?

Ciertamente sus amigas estaban, un poco/muy equivocadas.









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Ambos la miraban ir de un lado a otro, la manera en como la corbata era arreglada, la forma en que su flequillo era despeinado y peinado en un patrón repetitivo, Satori sonrió, recordaba perfectamente como la madre de su época repetía lo mismo, pese a estar casadas la llama y nervios juveniles seguían ahí, Asher soltó un suspiro imitando a su madre la cual giro a verle, esos ojos oscuros amenazaban con degollar su cuello, pero muy en el fondo suplicaban ayuda con los nervios carcomiéndole la piel, él sonrió.

—Relajarse es necesario.–La mirada de ambos era cómplice, el marrón resplandecía, su lenguaje secreto.–No lograrás nada viéndote como un desastre, aunque…

—Eres el desastre preferido de Enid.–Interrumpió con esa sonrisa canina, el brillo burlón en su mirada azulada le brindo un poco de gracia a la morena, había pasado de acechar a ser asechada.

El Addams Sinclair acomodo la corbata, tal cual como ella le había enseñado, sus comisuras levemente alzadas mostraban el hecho de estar satisfecho, le era dulce ver el joven amor de sus madres, por su parte la rubia menor se encargo de acomodarle el fleco, debía de estar presentable para su cita, era fanática del amor, del romance y de las miradas suaves, era admirarte del eterno amor entre sus madres.

—Estrás perfecta, créemelo.–Murmuró el pelinegro brindándole un apoyo mudo qué para la Addams significó paz pura.

—Solo se tú, Enid te adora siendo esta bolita sádica, para ella eres una maravilla única, la luz de la luna y la brisa de esta noche serán sus mejores aliados.–Addams pareció relajarse un momento, donde por primera vez quiso creer las palabras de Satori.

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⏰ Last updated: Apr 12 ⏰

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Natsukashii ●Wenclair ●Where stories live. Discover now