Big Brother | l.s

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-Que pasa contigo?- gemí atónito -Somos hermanos! Ya basta! Cual es tu problema?- retrocedí un poco pero el me sujeto.

-Que pasa conmigo? Me pasaron tu y tu madre Louis!- me grito apretando su agarre en mi muñeca -Si tan solo esa zorra jamás hubiera llegado a mi casa aquel día, y detrás de ella tu..- suspiro.

-Por que la odias tanto? Ella nunca te trato mal..- yo no intentaba defender a mi madre pero era una pregunta válida.

-Por que la odio? Por que es la clase de persona que más repudio en esta tierra...ella llego, con todos sus encantos y su linda sonrisa.- me miro a los ojos -Pero a los 3 meses de que mi padre se enfermara yo me encontré con que tu encantadora madre se encontraba a escondidas con otro hombre socio de mi padre!- me quede helado. Yo sabia lo que ella hacia, pero no sabia que Harry se sentía de esa manera.

-Yo...Harry, yo lo siento mucho.- susurre cubriendo mi rostro.

-Por que lo sientes? Tu no eres nada diferente.- espeto en un gruñido. Yo lo mire tratando de descifrar lo que me decía con sus ojos, realmente me confundía.

-No te das cuenta no es así?- se rió amargamente. -Louis, llevo estando enamorado de ti desde los 16 años y tu...en el momento en el que me marche, tu simplemente encontraste a alguien mas no es así?- abrí los ojos de golpe y sentí que mi corazón rompía contra mi pecho como olas brutales en el mar.

-Harry yo no...- susurre bajo.

-No digas nada, ya me lo has dejado lo suficientemente claro- me sonrió de nuevo, el, estaba llorando.

Tome su rostro entre mis manos. Mi pecho latía tan rápido, tan rápido que dolía. Me acerque con cuidado y nuestras narices se rozaron, el acerco su boca a la mía pero yo me aparte un poco y luego volvimos a acercarnos hasta que unimos nuestros labios. Acaricie su rostro y el me sostenía como si yo fuera a romperme en cualquier minuto. Y luego yo me rompía, me rompía cuando el aumentaba su fuerza en mis caderas para que yo no me separara de sus labios.

Me rompía cuando nos soltábamos. Y aun que fuera solo por unos segundos para aspirar de lo mas imprescindible que era para nosotros el oxigeno.

Me rompía cada vez que mordía suavemente mi labio inferior.

Me rompía cada vez que sus cálidas y húmedas lagrimas tocaban la piel de mis mejillas.

Y sobre todo...me rompía con cada roce.

-Harry...- apenas pude susurrar cuando la separación fue definitiva, él seguía repartiendo besos por mis labios y comisuras.

-V-vamos a casa...- le pedí tomando su mano suavemente y ambos nos levantamos mientras el dejaba unos billetes en la mesa.

•

Al salir afuera Harry me detuvo de golpe y yo me gire a verlo. Dio un paso hacia adelante y volvió a unir nuestros labios, al comienzo iba a alejarme.

Pero...esto lo necesitaba el tanto como lo necesitaba yo.