Mis días con Axel.

c u a r e n t a, f i n a l.

Día #40.

Recuerdo que una vez me dijiste el escritor decide que final agregar a su historia, y por primera no estuve de acuerdo contigo. Quería un final feliz, en el cual tú y yo nunca estuviéramos separados pero ahora solo nos separan miles de kilómetros.

Ese trágico día ambos caímos, yo me sostuve de la baranda dejándote caer a ti. Quise tomar tu mano para así evitar la caída pero fue un intento inútil en querer ser el héroe de la historia.

No lloré, por el simple hecho de tener el corazón en la mano. Al mirar hacía abajo y ver todo lo que había provocado no tuve más remedio que soltar el agarré que tenía mi mano y dejarme caer, yo merecía morir no tú.

Tu padre detuvo mi caída y no lo odié, solo quería estar cerca de ti.

Los estruendosos gritos de tu mamá se oían en todo el lugar, no la culpó, eras su única hija y la única a quien siempre amará como ello.

Luego de decir toda la verdad mi padre sería encarcelado pero lo encontraron muerto en su habitación, y es aquí donde digo que todo es injusto. Él podrá estar junto a ti mientras yo seguiré sufriendo en este asqueroso lugar.

Cumplieron tu último deseo, el quedar junto a la tumba de tu pequeña hermana...

Es una locura como en un solo momento,

Con una sola acción,

Todo podría convertirse en simples recuerdos.

Recuerdos que no se repetirán aunque lo desees.

Ahora tú te has convertido en uno de ellos...

Recuerdo la manera en que tus ojos brillaban,

Recuerdo tus labios los cuales me susurraban,

Recuerdo tu destellante sonrisa.

Recuerdo todo lo que tú poseías

Que a mi me hacía la persona más feliz del universo.

Debo estar contento

Tú estás en un mejor lugar

Y nuestra historia ha llegado a su fin,

Con el último recuerdo que poseo

Y que siempre tendré guardado.

Te amo Axel,

Y gracias por todo...

Princesa.