La mañana comenzó con el sonido de la música latina a todo volumen. Auron estaba tan metido en su tarea de limpiar la casa que no se percató de que Ari seguía en el sofá, aún dormida. Con su característico entusiasmo, Auron había decidido ponerse su atuendo más colorido para la limpieza: un delantal rosa brillante, con guantes rosas que llegaban casi hasta los codos, y un gorro de cocina con dibujos de patitos. La música de “Mama Luchona” sonaba a todo volumen, y él cantaba alegremente mientras limpiaba, sin ninguna vergüenza.
De repente, Ari despertó sobresaltada por el ruido. Abrió los ojos y vio a Auron de esa forma tan peculiar, lo que hizo que su mente procesara lo que estaba pasando de manera un poco más lenta.
—¿¡¿Qué demonios es esto?!— Ari se sentó en el sofá, aún con los ojos medio cerrados, como si no pudiera creer lo que veía. Auron siguió limpiando, ajeno a su presencia, mientras bailaba un poco al ritmo de la música.
—¡Hola, Ari! ¿Cómo dormiste? —dijo Auron sin mirar, haciendo movimientos exagerados con el trapo de limpieza.
Ari, completamente confundida, observó todo el panorama: Auron en su ridículo atuendo de limpieza, cantando y limpiando sin parar. No pudo evitar soltar una risa nerviosa, pero rápidamente la reprimió cuando recordó el motivo por el que estaba allí.
—Auron, baja la música, ¡estoy tratando de pensar! —dijo Ari con una mezcla de incomodidad y frustración.
Auron dejó de cantar y miró a Ari con una expresión de sorpresa, como si recién la notara.
—¡Ay, perdón! Es que la limpieza me pone en modo fiesta. —respondió, quitándose el gorro de un tirón, pero se lo volvió a poner de inmediato. —¡Es que hay que tener ritmo en todo lo que hacemos, Ari!
Ari solo suspiró, viendo cómo Auron trataba de hacer todo lo posible por no parecer tan ridículo. No entendía cómo alguien podía ser tan relajado en medio de tanta confusión, pero no tenía tiempo para eso. Tenía algo importante que hacer.
—Auron, necesito hablar contigo. Quiero espiar a Juan y a Spreen.
Auron se detuvo y la miró, con su típica expresión de "¿qué acaba de decir?" pero esta vez su tono cambió a uno más juguetón.
—¿Espiar a esos dos? ¿En serio? —dijo, levantando una ceja y comenzando a hacer pasos de baile como si fuera parte del plan. —¿Tú? ¿Espiar a Juan? Jajaja, ¡esto tiene potencial!
Ari no tenía ganas de bromas. Su rostro se tensó de inmediato.
—No, no es por diversión, Auron. Necesito saber qué está pasando entre ellos. Ellos… son diferentes, y me duele pensar que no soy suficiente para Juan. —dijo Ari, con una mezcla de desesperación y confusión.
Auron, al ver la seriedad en el rostro de Ari, dejó de bailar y la miró con una expresión más comprensiva, aunque con su toque cómico.
—Bueno, no sé qué haría yo si fuera tú. Pero no te preocupes, todo va a salir bien. ¡Ahora vamos a ver qué pasa con esos dos! —dijo Auron con tono animado, sacudiendo las manos como si estuviera en una misión secreta.
Ari resopló, pero asintió, ya decidida.
—Pero primero, quiero hablar con Zorman. Necesito contarle todo.
Auron no entendió nada, pero aceptó ir con ella al laboratorio de Zorman, donde no perdieron tiempo en dar el reporte completo. Al llegar al laboratorio, el aire estaba impregnado de un silencio serio. Zorman estaba en su espacio de trabajo, rodeado de probetas y libros de ciencia. Cuando vio a Ari entrar, no hizo ninguna expresión, pero se cruzó de brazos, como si ya supiera que algo "irracional" iba a ocurrir.
—Ari. —dijo Zorman con una voz profunda y calma—. ¿Qué me tienes que contar ahora?
Ari le miró fijamente antes de soltar todo.
—Juan y Spreen... Ellos tienen algo. ¿No lo ves? No son solo amigos, ¡es algo más! —dijo, dejando escapar una pequeña frustración.
Zorman la miró con una ceja levantada, claramente poco impresionado.
—No sé qué estás imaginando, Ari. Ellos son... hombres, y tú lo que estás haciendo es complicarte la cabeza. No tiene ningún sentido. —respondió Zorman, volviendo a mirar sus papeles sin darle mucha importancia a lo que decía.
Auron, que había estado observando en silencio, se rió por lo bajo, pero no interrumpió la conversación.
—Yo también pienso que es un poco exagerado. —dijo Auron, quitándose el delantal de limpieza y dejándolo caer por ahí. —A veces, Ari, uno tiene que relajarse y no sobrepensar las cosas. Eso solo nos lleva a momentos incómodos.
Ari no estaba tan segura, pero ya no le quedó otra que intentar calmarse. Sin embargo, no podía dejar de sentir que algo raro pasaba entre Juan y Spreen.
—Vamos a ver qué pasa. —dijo Ari, con una determinación renovada. —Hoy mismo los espío.
Auron dio una última risa.
—¡Esto va a ser épico! ¡Yo quiero estar en primera fila!
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♡~ AMOR EN EL SERVIDOR~♡ /SPRUAN/REBOOT
RomanceSpreen y Juan esconden algo más entre ellos: un amor secreto. Mientras intentan mantener su relación oculta, las pequeñas señales empiezan a delatar lo que realmente sienten. ¿Lograrán mantener su secreto o todo quedará al descubierto?"
