ADIOS PAZ, HOLA NARUTO (NARUSASU)

Nueva Lección

Sasuke se había levantado más temprano de lo común ese día. Al principio se extrañó al ver que su despertador sonó antes de lo normal, pero al recordar el día anterior en el que conoció a cierto rubio, se levantó rápidamente sin ninguna pisca de cansancio.

Estaba en este momento mirándose a su espejo. La verdad es que él no era de los que se quedaban todos los días mirándose a un espejo por horas, ni que fuera una adolescente, pero hoy era la diferencia debido a cierto propósito que tenía en mente...

Conquistar a Naruto.

Y después...

Hacerlo comer polvo.

Si no lograba que lo respete, entonces debía darle por el otro lado, ¿no? No quedaba de otra, por más molesto que sea.

Sasuke tenía que ser sincero consigo mismo, era la primera vez que se esforzaba en algo, lo demás siempre lo conseguía simultáneamente. Ya era la cuarta vez que se pasaba la colonia por el cuerpo, la quinta que se peinaba, la tercera que revisaba que no haya imperfección en su rostro... ¡pero si él era perfecto!, nunca había tenido que fijarse si había imperfección...

Y tampoco nunca lo habían ignorado, ni insultado, ni desafiado... ni... ni...

Como sea, Sasuke no pretendía cambiar de actitud para conquistar a ese dobe, siempre serio e indiferente, sólo tenía que poner en práctica algunas tácticas.

El pelinegro salió de su habitación muy satisfecho consigo mismo, como si fuera posible, estaba más guapo y sexy que nunca. Con una sonrisa de lado y una victoria asegurada, Sasuke tomó su mochila y bajó las escaleras con algo de prisa. Sabía que aún era temprano para ir a la academia, ¿pero qué más daba?, así tendría más tiempo tranquilo para trazar algunos otros planes...

_Buenos días, otouto – saludó su hermano al verlo pasar sin siquiera mirarlo.

_Hm – fue lo único que respondió Sasuke indiferente, caminando hasta la puerta de salida.

_ ¿No vas a desayunar? – ¡Al diablo con el jodido desayuno! Lo único que quería era partirle la cara... a su hermano o al dobe, cualquiera de las dos opciones lo tranquilizaría.

_No, quiero llegar a la academia lo antes posible – dijo serio el pelinegro menor.

_Oh, ¿vas a tratar de cazar tu presa? – preguntó burlón y sonriente Itachi, enfatizando la palabra "tratar".

Sasuke chasqueó la lengua irritado y se volteó a mirarlo estando ya frente a la puerta.

_ Ayer te dije que te haría tragar tus palabras y que no pasaría de hoy para que ese idiota se arrodille ante mí pidiendo por mi atención como la gran mayoría lo hace, así que adiós – el pelinegro abrió la puerta.

_Y... ¿Por eso te pusiste tanta colonia? Heheheh – seguía burlándose el desgraciado. Sasuke se sentía tenso... iba a romper algo... iba a romper algo... No, recuerda, Sasuke... el control es sinónimo de elegancia.

_Di lo que quieras, ya te voy a ver pidiéndome disculpas.

_Sí sí, lo que digas otouto-baka – decía despreocupado el pelilargo pensando que a los locos había que seguirles la corriente – pero tengo una mala noticia para ti, que lastimosamente arruinará tus "bondadosos" planes.

_... – Sasuke levantó la ceja curioso. ¿Qué podría arruinarle sus bonda... ehem!... sus planes?

_El chico ese no va a ir hoy a la academia... - respondió a la silenciosa pregunta con una pequeña sonrisa.

_...

Sasuke abrió grande los ojos, su mente comenzó a trabajar rápido y llegó a la obvia conclusión...