Se siente bonito eso de amar: las infinitas tardes observando el cielo, pisando las hojas del pavimento, tomarse de la mano, hacer pequeñas pausas para dar lugar a los besos... Sí, se siente bonito eso de amar, claro, cuando tienes a alguien con quien ver la caída del sol, cuando son cuatro los zapatos que destrozan las hojas, cuando hay quien de verdad toque tu mano y te bese.
Se siente bonito eso de amar, cuando tienes a esa persona cerca, cuando si estás mal es sólo decirle y estará en tu casa en 15 minutos, cuando puedes contemplar sus ojos en tiempo real... Sí, se siente bonito eso de amar, pero no cuando eres yo. Si eres yo amar se convierte en tristeza y fantasía. Se convierte él en siluetas que dibuja mi imaginación, en palabras que jamás a pronunciado, en recuerdos no vividos... Se convierte luego en mis lágrimas. Lágrimas desesperadas que quieren dejar de fluir y no pueden.
Y es que me siento yo tan... ¿Cómo decirlo? ¿Vacía? ¿Impotente? Al ver aquellos que se aman y se tienen, ésos que conocen cada centímetro de piel, que salen por las calles a esparcir su amor... Y yo, aquí. Esperando. Esperándote.
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He decidido escribirte.
Teen FictionYo había decidido no creer más en el amor, pero era tarde, su sonrisa ya me había enamorado.
