-Gra... gracias- digo más que agradecida.

Corremos en mitad de la noche por los pasillos totalmente a oscuras mientras que el carrito donde cuelga el suero chirria más que nunca, ojalá pudiera quitármelo de una vez.

-Vamos, más deprisa o nos pillaran- susurra Cam.

-¿Quién? Esto está completamente solo- protesto.- además tú no estás arrastrando con un carrito.-

-Cuando lleguemos a las puertas habrá sensores de movimiento e incluso hay cámaras de visión nocturna.-

-¿Y cómo se supone que vamos a entrar?- pregunto algo preocupada.

-Lo tengo todo controlado pero debemos de llegar antes de las en punto.- dice mirando su reloj con luz.

Corremos por pasillos interminables, todo está bajo un silencio escalofriante, apenas puedo divisar el cuerpo de Cameron delante de mí. Después de subir en el ascensor hasta la planta veinticuatro, nos encontramos con varias puertas dobles iluminadas con una luz azulada muy baja como para no dañar los ojos.

-Vamos ¡dame la mano!- me coge de la mano y voy el doble de rápido de lo que pueden soportar ahora mismo mis piernas, entiendo justo en este mismo momento el por qué Klaus se ha empeñado en que permanezca unas tres semanas en cama.

Rápidamente llegamos a dos enormes puertas dobles de hierro impenetrables. Delante de ellas una pantalla digital pide un código de acceso.

-¿Y ahora qué?- susurro.

-¡Calla! Tengo que concentrarme.- dice Cam.

Cierro la boca y observo como se mueven sus dedos por la pantalla.

Primero escribe una serie de números: 3577894-385-11 "debo recordarlo, quien sabe si tengo que volver a entrar" y más tarde introduce una palabra: ROTUNDUM "Otra palabra en latín".

De repente suena un pequeño pitido seguido del lento movimiento de las puertas.

-¡Espera!- me detiene justo cuando tengo la intención de avanzar.- ¡Los sensores de movimiento! ¿Es que no lo recuerdas?- mira súbitamente su reloj, después mira a las pequeñas cámaras que nos vigilan.- tenemos doce minutos nada más y luego tendré que borrar la grabación ¡mierda!-

-¡Cam! ¿Cómo nos libramos del sensor de movimiento?- digo observando lo que hay detrás de las puertas:

Tan solo un pequeño pasillo cuyo final termina en dos puertas dobles igual de pesadas que las anteriores.

-Hay que escalar por el techo.- señala hacia el techo de rejillas que recorre el pasillo.- hasta llegar a aquel botón que lo desactivará.-

-¿¡Me estás vacilando o qué!?-

-¡No! ¡Tú decidiste que te llevara aquí!-

-¿¡Me estás diciendo que Klaus hace todo esto cada vez que quiera consultar algo!?-

-¡No! Él puede pasar sin problemas ya que a mitad del pasillo es reconocido por su rostro. ¿Lo ves? Ahí arriba.- dice mientras señala un punto de luz que hay justo encima de las puertas.

- Bueno ¡haz lo tú! ¡Rápido!-

Cameron se coloca en la línea que separa el suelo de mármol, donde estoy yo y el suelo de metal. De repente pega tal salto que pienso que se estrellará contra el techo pero justo en ese instante sus manos agarran las rejas, poco a poco avanza mientras pega totalmente el cuerpo contra la superficie.

-¡Vamos!- susurro en cuanto me parece escuchar unos pasos a lo lejos.

El corazón me late con fuerza pero estoy más que dispuesta a golpear a quien sea para poder conseguir la información que necesito para saber más al enemigo al que me enfrento. Cameron logra llegar hasta el final del techo, a unos cuantos centímetros se encuentra el botón que lo desactivará todo pero...

INCOMPLETETahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon