Zury fue la única compañía de Zail durante el día, aunque él especificó el día anterior lo mucho que lo desesperaba.

-Ojalá, Zail no hubiera venido hoy. –le dije a Vlad en la salida, cuando creía que éramos los dos últimos.

-¿Para que pudieras hacer lo que quieras sin que te juzguen?

-¡No!... No me refería a eso, estuvo solo todo el día, y probablemente triste... -balbuceé nervioso.

Vlad se encogió de hombros y espetó con tranquilidad: -No me importa.

-A ti sólo te importa tu persona, ¿no? –dije intentando sonar amable, no quería que se ofendiera con mi pregunta.

-Y mi familia... y mis amigos. –dijo devolviéndome la sonrisa, en seguida llegó su mamá por él y me quedé solo.

Di una vuelta por la escuela hasta encontrar a Zail, no sabía si acercarme o no, no sabía lo que ahora pensaba de mí, seguramente me odiaba.

Me senté junto a él guardando nuestro espacio personal, antes podía acercarme a él todo lo que quisiera y reíamos como tontos, pero ya no...

Y era por mi culpa.

-¿No te has ido? –fue la primera pregunta que le hice para iniciar conversación, no tenía nada mejor que decir.

-No... tú tampoco. –respondió como si no pasara nada, aunque su hilo de voz me decía todo lo contrario.

-No, je je, se olvidaron de nosotros. –en eso vi por la ventana que daba a la calle el auto de su padre, era verde y pequeño, parecía un escarabajo. –Ya llegaron por ti.

-¿Ah sí? Bueno, hasta luego. –se despidió sin siquiera verme.

Cuando se salió de mi rango de vista me hice bolita y me quedé allí, esperando a que mi mamá llegara por mí, pero no lo haría, tendría que volver a casa solo.


Lunes

Kyle, Zail y Hans interrumpieron en el salón como solían hacerlo, a gritos y riendo, había apostado a Zury y a Vlad que primero entraría Kyle, después Zail y al final Hans, pero perdí...

Los tres llegaron al mismo tiempo.

-Deberías dejar de apostar Chris, siempre pierdes. –se burló Vlad.

-Yo no entiendo por qué tienes tan mala suerte. –se rió Zury, de fondo se oía a Ismael, Ian y Marshall jugando a ver quién daba el eructo más fuerte.

Ese día, casi antes de que sonara el timbre de salida, iba caminando y Zury y Amme jugaban con una pelota, al pasar por allí Amme me aventó la pelota y le dije que no quería que lo volviera a hacer, pero lo hizo y estuve a punto de golpearla.

Ian me separó de ella y me regañó a mí, no a Amme y ella se hizo la víctima.

Me quedé en un rincón sentado y furioso, estaba junto a Vlad pero él no me hacía caso, si no era el chico sonriente y divertido a Vlad no le interesaba, nunca le interesó ver a la gente triste.

Zail llegó junto a mí y me mostró una foto mía de cuando estaba bailando con el bóxer en la cabeza arriba de la mesa, nos reímos a carcajadas...

Zail aún era mi amigo.

-¡Hey, Pigeon! –me llamaron Hans y Kyle al mismo tiempo desde el otro lado del salón.

-Vamos. –me sonrió Zail yéndose con los demás. Volteé a ver dudoso a Vlad, pero él estaba ocupado riéndose con Yusuf y Amme. Así que fui con ellos.

Hablamos sobre los viejos tiempos, cuando estaba unido a ellos, sobre historias fantásticas que me perdí y así...

Y quería volver a ser 'los 4 fantásticos', pero no quería dejar a Vlad ni a Ismael, y a ellos no les caían bien, no se caían bien mutuamente, así que estaba entre dos mundos totalmente diferentes y enemigos.


-¿Qué se siente ser reemplazada por Denisse? –la pregunta sonó por todo el club, como si el tiempo se hubiera detenido, la música, el color y todo se había detenido sólo para escuchar la pregunta indecente que le hice a Zury.

Hace días, Zury empezó a tener una relación con Ismael, y nadie se lo esperaba. Zail terminó un poco deprimido desde ese día, Kyle hizo un escándalo y Hans sólo se burlaba de Zury cada vez que podía.

Los demás estábamos felices por ellos.

Un día cuando pasé por el salón de clases de Zail, lo vi coqueteando con una chica que acababa de terminar con su novio, era la pareja más odiada de la escuela, porque desde un principio todos querían que Denisse y Zail terminaran juntos pero después llegó Oscar (el tipo más odiado de la escuela) y se quedó a la fuerza con Denisse.

Luego llegó Zury a la vida de Zail y bueno... la historia es historia.

Así que le hice esa pregunta a Zury cuando tuve oportunidad, pero hubo tal silencio que me sentí extremadamente incómodo, tuve que tomar una libreta rápidamente para disimular mi nerviosismo:

-¡Vamos! Te escucho. Es para una historia que estoy haciendo.

Zury volteó a ver a Vlad enojada. -¿Por qué no me advertiste de eso? –gruñó. Noté como Zail y Kyle susurraban y reían.

-Estoy esperando. –seguí mientras dibujaba estupideces, me temblaba la mano.

-¿Vlad? –volvió a gruñir Zury.

-Te juro que no sabía que iba a hacer eso. –contestó él. Hans se unió a los susurros y risas de Kyle y Zail.

-¿No vas a decir nada? –pregunté con una sonrisa amplia.

-Es mejor que te vayas, si no seguirá haciendo preguntas estúpidas. –le recomendó Vlad. Zury se quedó parada un momento, no sabía a dónde regresar, estaba pasmada y humillada en medio del club por mi pregunta, para hacerme el fuerte le grité:

-¿No oíste? Ya te puedes retirar. –y me giré para seguir dibujando sin tener que verla a los ojos y enfrentarme a ella. Vlad se recostó avergonzado en la mesa y me escribió:

Eres un idiota.

Reí para aparentar, luego volteé a ver a Kyle y estaba jugando con su celular, igual que Zail y Hans, hasta el fondo estaba Zury, callada y enfadada.

No entiendo lo que hice mal. Respondí.

Tendrás que disculparte con ella. Volvió a escribir Vlad.

Tal vez luego, no tengo ganas.

Zury y yo éramos excelentes amigos, pero desde esa pregunta no me volvió a hablar lo que restó del año, y me lo merecía...

Pero yo tampoco hice un esfuerzo por recuperar su amistad, no me interesaba. Y empecé a darme cuenta de que si seguía así, me quedaría sin amigos.

No tardaría en hacer una estupidez contra Vlad y que al final me quedara solo y odiado.

Me lo estaba buscando.

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