Narra T/n:
Hace aproximadamente un año mi hermano empezó la universidad, y aunque llegué a creer que sería una mala experiencia debido a que iría en la misma universidad que yo, resultó todo lo contrario.
Yo había ingresado hace un año exactamente, pero mi hermano no había logrado ser seleccionado. Cabe destacar que aunque somos mellizos, no compartimos tanto parecido físico.
Con un buen puntaje, yo logré quedarme en la carrera de veterinaria, mientras que mi hermano se quedó en la carrera de historia y filosofía.
Desde que empezaron las clases ha ido conmigo a almorzar, o tratamos de vernos durante los descansos para ir juntos a la cafetería que está justo al frente de la universidad. Pero durante las últimas dos semanas, había traído con él a un chico con el que compartía clases.
Cuando lo conocí por primera vez, fue inevitable no notar el increíble atractivo físico que tenía. Sus labios al hablar lograban desconcentrarme demasiado, a tal punto que en más de una ocasión tenían que repetirme lo que decían porque definitivamente perdía mi concentración al verlo.
Hoy estaba bastante ocupado mi día, pero trate de hacer un pequeño espacio justo al medio día para poder ir con mi hermano, y ver a su amigo, a Edward.
Sabía perfectamente mi hermano que ese chico había despertado cierto interés en mi. Desde pequeña fui bastante obvia cuando alguien me gustaba, así que está vez no sería la excepción.
Justo cuando me dirigía al lugar de encuentro con mi hermano, me llega un mensaje donde me avisaba que no podria ir a desayunar ya que estaba ocupado haciendo unos trámites en la oficina de rectoría. Así que no me quedó más opción que ir yo sola.
Me sentía un poco decepcionada porque creí que hoy no vería a Edward. Pero estaba equivocada. Cuando di vuelta para ir hacia las mesitas dónde muchos estudiantes solían estar, ahí estaba él, sentado en una mesa mientras leía un libro.
Definitivamente, viéndolo así, es el tipo de chico que me gusta. Agradezco infinitamente a mi hermano por haber decidido hacerse amigo de Edward, porque gracias a eso podía verlo durante los descansos.
—Hola, Alejandro me avisó que no vendrá—le avisé cuando llegué a la mesa con él.
—Ah, sí, también me avisó—dijo sin quitar la vista de su libro.
Pensé por un momento que al terminar de leer algún párrafo más o cuando terminara el capítulo, hablaría conmigo, o que me diría algo más. Pero no fue así. Poco a poco, mientras avanzaban los minutos solo pude notar su indiferencia.
Él comía tranquilamente unas galletas y seguía leyendo. Así que no siquiera dejé pasar un minuto más, yo cerré el contenedor donde llevaba fruta, lo guardé en mi mochila y me levanté del lugar.
—Qué tengas un buen día...—dije un poco molesta y me fui de ahí.
Claro que me gustaba, y para mí él seguía siendo el chico más lindo que haya visto en mi vida, pero tampoco iba a permitir que se atreviera a hacer ese tipo de acciones.
—¡T/n!—escuché a alguien gritar mi nombre.
Al voltear noté a Edward correr hacia mi con sus cosas. Lo miré con asombro mientras veía como corría hasta mi.
—Es que aún me da algo de vergüenza hablar contigo, no creas que no me gusta estar contigo —me dice algo avergonzado.
Me sorprendió haber escuchado aquello, sinceramente no habría creído que hiciera esto.
—Ah, no te preocupes —le dije aún con gesto de seriedad —Entiendo perfectamente —comencé a caminar.
—Lo digo en serio, tu hermano es la única persona con quién realmente me acoplé desde el día uno. Y también contigo, ambos son agradables —me dice caminando a mi lado.
أنت تقرأ
Imaginas y One Shots •|Edward Furlong|•
أدب الهواةPequeños relatos, historias e imaginas con Edward Furlong.
