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Sirius Black

Destino Entrelazado

POV'S NARRADORA:

Sirius Black caminaba por los terrenos de Hogwarts con una sonrisa en los labios, disfrutando del cálido sol primaveral que iluminaba el castillo. Sus ojos grises centelleaban con vitalidad mientras saludaba a sus amigos y compañeros de casa. Sin embargo, su atención fue capturada por una figura elegante que se deslizaba entre los estudiantes en el Gran Comedor.

Marie Grindelwald, una joven Slytherin de mirada penetrante y cabello oscuro, atrajo las miradas curiosas de muchos presentes. Con paso seguro y gesto altivo, parecía desafiar a cualquiera que se atreviera a cuestionar su presencia en aquel lugar.

Sirius no pudo apartar la mirada de ella, fascinado por la aura de misterio que la rodeaba. Decidido a romper el hielo, se acercó con una confianza que rayaba en lo descarado.

-¿Y qué hace una encantadora serpiente como tú en territorio de leones, Grindelwald? -preguntó Sirius con una sonrisa pícara.

Marie lo observó con cautela antes de responder con un destello desafiante en sus ojos.

-Quizás estoy buscando algo más emocionante que las intrigas insulsas de mi casa, Black.-

La chispa de complicidad entre ellos fue instantánea, desatando una serie de conversaciones clandestinas y encuentros furtivos que los llevaron a descubrir un mundo nuevo entre risas compartidas y confidencias susurradas.

A medida que los años pasaban, el vínculo entre Sirius y Marie se fortalecía, desafiando las barreras impuestas por las diferencias entre Gryffindor y Slytherin. Sus corazones latían al unísono en cada mirada furtiva y cada caricia robada en los rincones ocultos del castillo.

Una tarde, mientras paseaban por el Bosque Prohibido, Sirius tomó la mano de Marie y la miró con determinación.

-Marie, no puedo imaginar mi vida sin ti. Eres mi luz en medio de la oscuridad. ¿Te casarías conmigo?-

El brillo en los ojos de Marie reveló la intensidad de sus sentimientos.

-Sí, Sirius. Estoy dispuesta a enfrentar cualquier desafío a tu lado.-

Juntos sellaron su amor en un pacto eterno, decididos a enfrentar juntos lo que el futuro les tenía preparado.

Los años transcurrieron velozmente hasta que la tragedia golpeó a la familia Potter. Ante la ausencia de Lily y James Potter, Marie tomó la valiente decisión de acoger a Harry en su hogar y criarlo junto a sus mellizos como si fuera su propio hijo, brindándoles amor incondicional y protección en un mundo marcado por la oscuridad.

Sin embargo, cuando Sirius fue injustamente acusado y encarcelado por crímenes que no cometió, Marie se vio dividida entre la lealtad hacia su esposo y la incertidumbre sembrada por las acusaciones en su contra.

-Marie, ¡debes creerme! ¡Soy inocente!- clamaba Sirius desde detrás de los barrotes de Azkaban.

Las lágrimas inundaban los ojos de Marie mientras luchaba por reconciliar sus emociones con la realidad que se desplegaba ante ella.

Finalmente, cuando la verdad salió a la luz y Sirius recuperó su libertad tras años de injusticia, el reencuentro con Marie fue agridulce. A pesar del alivio que inundó sus corazones al verse nuevamente juntos, ambos eran conscientes de las grietas que habían surgido en el tejido frágil pero resistente de su amor.

El camino hacia la reconciliación sería largo y lleno de obstáculos para Sirius y Marie. Sin embargo, cada mirada cargada de complicidad entre ellos atestiguaba el vínculo indeleble que los unía desde hacía tanto tiempo.

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