CAPÍTULOS UNICOS // LA VIDA DESPUÉS DE CASADAS

Tan Solo Amantes XLIV (CAPÍTULOS ÚNICOS)

Emiliano observaba a Flavia, estaba tan callada, pensativa, solo revolvía su taza de café.

-¿Qué pasa Flavia?

Ella no respondió.

-Hey. -le tiro la servilleta.

-¿Qué? Emiliano quédate quieto. -se quejo.

-¿Qué pasa? Se que eres muy reservada pero sabes que puedes contar conmigo po.

-No me sucede nada, solo estoy cansada.

-¿De qué?

-¿Fumaste hoy? -pregunto seriamente.

-No Flavia, dejate de bobadas. ¿Me quieres hablar? -pregunto con una sonrisa en el rostro.

-Voy a divorciarme de Dante.

-¿Qué? -la observo confuso.

-De hecho hace rato le pedí que se fuera de mi casa, es mia. -bebio su café.

-¿Qué dice la Miranda?

-La Miranda esta bien con eso.

-¿Motivos?

-Ya no iba más. -mintió.

-¿No? ¿O fue por la paca?

-Emiliano. -negó.

-¿Fue por ella?

-No, y ella lo sabe. -sonrió.

-¿Quieres hablar de eso? Soy tu hermano y jamás voy a juzgarte, solo estaré aquí y opinaré si tu me lo permites po. -afirmo.

-Eres poco confiable pero ya que.

Cruzo la sala y se sentó junto a él.

Lo miro entrecerrando sus ojos, ya estaba ahí, que más daba.

Después de contar desde el inicio y con ciertos detalles regreso a su lugar.

-¿Te dio más duro que los churritos? -bromeo.

-Weona culia. ¿Qué mierda contigo?

-¿Qué? No se qué te espanta. -alzó sus hombros. 

-No me espanta, me sorprende de ti, eres mi hermanita.

La pelirroja rió.

-Soy tu hermana mayor.

-No dejas de ser mi hermanita. -afirmó.

-Ya pue. -bebio más de su café.

-¿Puedo dar mi opinión?

-Venga. Tiene que ser rápido antes de que llegue la Miranda. -añadió.

-La paca no asimila que no eres la misma Flavia que encandiló y tú no asimilas el hecho de que te asusta el compromiso con ella, temes que ella no sepa lo que es realmente y que tú tengas que educarla, que le enseñes como tiene que quererte,tratarte. ¿Voy bien? -sonrió.

-¿Luego?

-Tú no acabas por confiar al 100 y no es extraño ya que alguna vez ella te lastimo por miedo a herir a los demás. A ella le faltan pantalones y a ti confianza. -tomo tu cerveza de la mesa.

-¿Es muy caro lo que fumas?

-Ay ya, que chucha contigo. -se quejo.

Ambos rieron.

Más tarde llego Miranda, pidió permiso para ir al cine con Pascal y su hermana.

Flavia se alistaba para ducharse cuando el timbre sonó.

-¿Ahora que? -se quejo colocándose una bata de baño.

Bajo rápidamente, ni miro la cámara y abrió la puerta, si había cruzado el portón es porque era de allí mismo. 

-¿Dante?

-Contigo es con quien quería hablar.

...

Javiera se había tomado el resto de la tarde para pensar las cosas, últimamente no sabia como hilar con Flavia, temia equivocarse con ella, como lo hacia siempre.

¿Pero a quien le iba a pedir un consejo? ¿A Leiva?

Rió de solo imaginarlo.

-¿Qué vas a hacer Caceres? -se tiro en la cama mirando al techo.

La alejo de sus pensamientos la vibración de su celular.

Miro la pantalla y se sorprendió un poco.

-¿Flavia? -hablo.

-Necesito que vengas a mi casa. -tosio.

-¿Qué pasa?

La llamada se corto.

-¿Flavia? ¿Aló? -intento marcar pero nada. -¡Mierda!

Tomo su mochila y salio de allí tan rápido como pudo.