Bonjour Francés, Bonjour Madmoizelle

CAPÍTULO 12: ¿Quien es ella?

A la mañana siguiente me desperté por mi celular y vi que Tara me había llamado 30 veces y me había dejado 155 mensajes.

Entre en los mensajes y vi que su hermana había nacido, la felicité pero en vez de recibir un "Gracias" solo me dejo en visto.

Baje abajo para ver a Bastian pero ya no estaba, había dejado todo ordenado y justo sonó mi celular con un mensaje de el y sonreí.

Me preparé para ir a ver a Tara que debería de estar aún en el hospital hasta que le den de alta a su madre, así que pedí una app un chófer y fui hasta allí.

Pague al chofer y caminé hasta la entrada donde me saludaron algunas enfermeras y doctores que eran colegas de mi padre, caminé por los pasillos como me había indicado una enfermera para encontrar la habitación donde se encontraba la madre de Tara y de repende estaba parada en frente de la puerta, pero antes de que tocara se abrió.

—Oh, Elena que gusto verte —el padre de Tara estaba en la puerta con una sonrisa y de fondo vi a Tara con el ceño fruncido.

—Hola señor Davies —le di una sonrisa nerviosa y el se hizo un lado.

—Adelante —me dijo haciendo seña para que entrará y vi a la madre de Tara con un bebe en su regazo.

—¡Elena! Que sorpresa verte aquí —la señora Davies se incorporó en su lugar y me sonrió.

Ella y Tara se parecían muchísimo con esa cabellera rubia y esos ojos azules.

—Felicidades señora Davies.

—Gracias y dime Margaret —se río y puso al bebe en su cuna.

—Hola, desaparecida —dijo Tara con los brazos cruzados.

—Hola —rodé los ojos por su comentario y la abracé.

—Felicidades por ser hermana mayor dime, que se siente? —nos apartamos del abrazo y ella se río sarcásticamente.

—Ja ja, gracias, la verdad es que quiero retroceder el tiempo para evitar que exista —se acercó a mi y me susurró. —Esa bebe no es normal, llora como rata siendo aplastada.

—Te estoy escuchando —dijo la madre de Tara a regañadientes.

—Como te decía, es hermosa la maternidad jaja —dijo Tara con una sonrisa falsa y su madre solo le lanzó una mirada.

—Que te trae por aquí? que yo sepa no te eh invitado —dijo Tara con los ojos entre cerrados.

—Yo la invité —dijo la madre de Tara salvandome el pellejo y haciéndome una seña para que me acercara a ella.

—Como siempre quitándome a mi amiga mamá —Tara rodeó los ojos y fui hasta su madre mientras me reía.

—Quieres alzarla?

—Quién? Al bebé —dije sorprendida y la señora Margaret asintió alzando al bebé.

—Se llama Tessa —dijo y la puso en mi regazo, yo algo torpe la agarré y la miré asombrada, era tan chiquita, tenía las pestañas rubias y dormía profundamente.

—Mamá tiene una obsesión con la letra t —dijo Tara acercándose a mi lado.

—Quería que tuviera la t como tú
—dijo su madre pinchando la punta de la nariz de Tara.

Nos reímos y luego de estar unos minutos más, Tara y yo fuimos a su casa ya que ella aun no se había bañado de lo nerviosa que estaba ayer.

—Espera, todo eso ocurrió en MI ausencia? —dijo Tara mientras se peinaba su cabellera rubia.