Nuestra familia

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El sol de la tarde se filtraba por las cortinas entreabiertas del modesto departamento que el Bad Batch compartía en la ciudad de Pabu. Tech estaba sentado frente a la mesa de la cocina, concentrado en su ordenador portátil, mientras que Hunter y Wrecker discutían animadamente sobre el último partido de gotcha que habían jugado en el campo universitario. Crosshair, por su parte, estaba recostado en el sofá, con los pies apoyados en la mesa de centro, leyendo un libro.

El ambiente estaba lleno de una tranquilidad habitual cuando Echo entró en la sala.

—¿Alguien ha visto a Omega? —Preguntó, buscando a su hermana menor.

—Debe estar en camino.—Respondió Hunter, echando un vistazo al reloj en la pared. —Debería estar llegando de la escuela en cualquier momento.

Justo en ese momento, resonó el sonido de la puerta principal siendo abierta y cerrada. Omega entró en la sala, cargada con su mochila escolar y una expresión de cansancio en su rostro. —¡Hola, chicos! —Saludó, dejando su mochila en el suelo y corriendo hacia la cocina. —¿Qué hay de comer?

Wrecker sonrió ampliamente. —¡Parece que alguien tiene hambre!—Dijo sonriente y con su característico tono de voz animado y juguetón, levantándose para buscar algo en la nevera.

Mientras Omega y Wrecker calentaban una pizza congelada en el microondas y preparaban un poco de mezcla mantell, el resto del Bad Batch se reunió alrededor de la mesa de la cocina, compartiendo anécdotas del día y disfrutando de la compañía. Sin embargo, la tranquilidad se vio interrumpida por el sonido de la televisión que estaba encendida en la sala.

Todos los ojos se posaron en la pantalla cuando la imagen del candidato; Palpatine, apareció, acompañada por un titular que anunciaba su reciente ascenso a la alcaldía de Pabu. Un silencio tenso llenó la habitación mientras el Bad Batch absorbía la noticia.

—¿Palpatine? —Murmuró Echo, frunciendo el ceño. —¿Qué hace él aquí? ¿No se supone que Shep Hazard llevaba la delantera?

Crosshair arqueó una ceja, su expresión llena de sospecha. —No confío en ese tipo —Dijo en voz baja, bebiendo de su soda. Sus ojos estudiaban cada movimiento del político en la pantalla.

Mientras observaban la transmisión, una sensación de inquietud se apoderó del grupo de hermanos. La llegada de Palpatine al poder prometía un futuro incierto para la ciudad que llamaban hogar, y ninguno de ellos podía ignorar las implicaciones de este cambio en el paisaje político de Pabu.

Con la comida olvidada temporalmente, (excepto por Omega, la cual comía tan rápido como podía antes de que Wrecker fuese más rápido que ella) los hermanos se sumieron en un silencio reflexivo, conscientes de que el camino por delante sería mucho más complicado de lo que habían anticipado.

La rubia, después de comerse unas cuantas rebanadas de pizza y beber su jugo de naranja, se deslizó sigilosamente hacia su habitación, restándole importancia a lo que ellos veían a través de la televisión, pues desconocía sobre política.

Tomó su diario, se aventó en su cama y comenzó a escribir:

"Querido diario...

Hola.

Soy yo, Omega, otra vez.

Te escribo porque hoy fue un buen día en la escuela. Lyana y yo logramos entregar la tarea a tiempo, nadie se dio cuenta que hicimos todo en cinco minutos, de lo contrario, hubiesen llamado a Hunter para decirle otra vez que no hice mis deberes a tiempo. Como sea, aprendí muy bien de Tech cuando me enseñó esos trucos para entregar tareas a último minuto, solo espero que no se entere que lo hago seguido, o se arrepentirá de habérmelo enseñado.

Todos me han enseñado tantas cosas desde que llegué. 

Amo esta familia.

Aunque nuestros padres nos hayan dejado a nuestra suerte (que es lo que yo pienso, nadie quiere explicarme nada) no cambiaría esto por nada.

Disfruto mucho la escuela, aunque haya muchos maestros molestos, tengo a Lyana conmigo.

Disfruto cuando salgo a pasear con Hunter y hablamos desde cosas simples hasta cosas profundas, disfruto cuando Echo me prepara el desayuno y me recibe todas las mañanas para llevarme a la escuela, disfruto ver películas con Crosshair y pasear en su moto, disfruto hacer bromas con Wrecker e ir al cine y comprar mezcla mantell y también disfruto cuando Tech me ayuda con mi tarea a pesar de que casi no duerme y él esta repleto de tareas por hacer.

Los amo.

No se los he dicho, pero se los diré pronto.

Escribiré pronto diario.

Firma, Omega.


Crosshair, con una expresión de frustración en el rostro, lanzó su pajilla al suelo con un gesto brusco. —No puedo creerlo.  —Murmuró entre dientes.

Sus hermanos miraron como él se levantaba de la mesa con un movimiento brusco. —Voy a dar una vuelta.—Anunció.

Tech, siempre el más pragmático del grupo, intervino rápidamente. —Recuerda que tenemos partido más tarde.—Le recordó, levantando la mirada de su ordenador portátil. —No te tardes demasiado.

Crosshair asintió con su gesto habitual antes de salir del departamento, tomando su casco y cerrando la puerta tras de sí.

The Bad Batch: Realidad alternaWhere stories live. Discover now