En el Verano, en la playa

782 17 2
                                    

Aunque eramos amigos desde hacía poco tiempo parecía que Sandra me conocía de toda la vida. Era una chica de mentalidad muy abierta, pero siempre nos tratábamos como verdaderos amigos.
Ella sabía disfrutar de verdad, con placer morbo e imaginación sus aventuras.
Gracias a ella conocí a una novia, una muy amiga de ella, lamentablemente, no duramos mucho tiempo, ya que ella me dejó, y si bien estuve mucho tiempo dolido por esa situación que viví, más tarde me enteré de forma muy humillante del porque de esa separación.

Ese verano, fue en donde todo empezó.

Últimamente le estaba gustando fantasear conmigo y hacerme probar cosas nuevas.

Para aquellos entonces nuestra relación iba más allá de una amistad entre amigos.

A mi me gusta probar lo que Sandra me proponía, y ella cada vez más le gustaba jugar conmigo, meterme un dedo y ultimamente hasta probar a meterme un consolador pequeñito y cuando yo estaba a punto de acabar me decía que me imaginaba  que era una verga dura y caliente dentro de mi. Yo no decía nada, pero reconozco que a veces me daba mucho morbo.

Ya en el hotel donde nos hospedamos, ese día estabamos algo cansados, era nuestro primer día de vacaciones, y nos pusimos a ver porno en internet y ella empezó a pinchar videos de transexuales.

Abiertamente comentamos que era muy morboso esos cuerpos preciosos con enormes pechos y que de repente tenían un pequeñito bultito todo duro. Noté como a Sandra le encantaba que yo elogiara esas chicas y yo con lo atractivas que eran las actrices las hubiera tocado sus penes y lo que me pidieran.

Desde ese día Sandra siempre me enseñaba fotos de penes, y veíamos videos porno gay donde los actores tenían algunas enormes vergas, que se chupaban y se metían en el culo sin piedad. Yo no podia evitar fijarme y a Sandra eso le excitaba.

Cada vez más veces jugábamos con el consolador cuando jugabamos, y me lo metía en el culito diciéndome al oído que me imaginara que era una de esos actores haciéndome sentir toda una nena, que habíamos visto en las pelis porno.

Pero la aventura de verdad comenzó unos día que nos fuimos los dos a la playa. Teníamos una habitación en un hotel cerca de unas preciosas playas y una de ellas era una famosa playa nudista en la que el ambiente era sobre todo de chicos.

-Claro que me parece buena idea ir a la playa nudista, Sandra- le dije yo. - Además hay mucha menos gente y estaremos más tranquilos. La playa era preciosa. Nos pusimos a tomar el sol en una zona un poco apartada, pero ese día pasaba mucha gente relativamente cerca.

Nos echamos crema en nuestros cuerpos desnudos. A mi me encantaba echar crema por todo el cuerpo de Sandra, especialmente por sus preciosas tetas. Y ella se entretuvo sobre todo en mi pene para que no se me quemara, pero con tanta caricia se me puso algo empalmada, y en mi culito, que medio en serio medio en broma mientras me echaba crema me metió un par de veces el dedo dentro.

Jose cariño, has visto que de lindos hombres  hay en la playa?-

Sí, jej. Dije con total incomodidad.

-bueno, ya sabés que yo pienso que todos somos bisexuales, y cuando menos el disfrutar de ver esos cuerpos y esos mástiles colgando no me lo quita nadie jeje. Seguro que a ti también te está gustando verlo - me dijo mientras me rozaba mi pene disimuladamente.

-Bueno, a mi me gustan las mujeres - dije yo.

-Amor mio, tenés que tener una mentalidad más abierta. O no disfrutabas mientras chupabas mi consolador y te imaginabas que era uno de esos mástiles de macho? . Además me estoy dando cuenta que te estás fijando en el cuerpo de algún chico y en sus mástiles jiji. -Te gustaría que charlemos con alguno?

Nuevos Placeres Para jóseWhere stories live. Discover now