❄️ Represión.

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Un antiguo, pero muy reconocido poeta inglés, de nombre William Shakespeare, dijo una vez: "Las heridas que no se ven son las más profundas"... y aunque no recuerda cuando o dónde exactamente fue que leyó por primera vez esa frase, la misma suele resonar cada tanto en la mente de la ahora adulta joven Touka Todoroki, quién durante las mañanas, cuando despierta tras soñar que logró salvarlo de las llamas de su propio infierno, con lágrimas en los ojos ve el sentido de la frase en su piel.

Por lo mismo es que durante esas mañanas melancólicas se suele abrazar a sí misma y a su muñeca izquierda en lo que parecen horas hasta que alguien llama a su puerta a desayunar en la plata baja de la casa.

—¡Es hora del desayuno!

... Como ahora.



























Tenía que ser una broma, un mal chiste de esos que cuenta su profesora de historia y que nadie entiende; si lo era, tenía que serlo o eso quería creer Touya, mientras veía a su hermana mayor darle de comer a ese niño... como cada mañana.

ELLA PARECÍA SOLO MIRARLO A ÉL.

Y no solo ella, TODOS.

TODOS LO MIRABAN.

SOLO A ÉL.

Ese niño, ese bebé... ¿Por qué?

Sus cercanos, su madre, Fuyumi, Natsuo...

Su padre...

¡¿POR QUÉ?!

¡¿Por qué incluso hasta Touka, la única que en un principio lo apoyaba, le daba la espalda y miraba hacía ese maldito niño?!

—Shosho, abre la boca y di: "Ah~"—Touya frunció el ceño al escucharla hablar.

No sabe desde cuando, ni en que momento pasó, pero aparentemente ese mocoso caprichoso había adquirido la costumbre de que si no era su hermana mayor la que le daba de desayunar, no comería.

—¿Y mamá...?—Ni buenos días, ni nada, solo entró arrastrando los pies, fastidiado a la cocina con cara de pocos amigos y se sento entre medio de Fuyumi y Natsuo, quienes comían cereal, absortos del estado de ánimo de su hermano mayor.

—Acompaño a nuestra abuela al hospital, volverá más tarde. También papá llamó, regresa a casa al atardecer—Touya no la miró directamente, pero si de reojo prestó atención a como le daba una cucharada de papilla al pequeño Shoto, quién comía sin queja o drama.—¡Bien, Shosho!

—¿Y mi desayuno?

—En la mesa de la cocina, sírvete.

—Siempre lo haces tú—Frunció aún más el ceño, poniéndose de pie.

—Estoy ocupada con Shoto, ¿No ves?

—A Fuyumi y a Natsuo si les serviste—Tomó la caja de leche y se sirvió en un tazón.

—Tuve tiempo porqué ellos se levantaron mucho antes que Shot-...

—Shoto, Shoto, Shoto...—Terminó tirando el tazón al suelo.—¡Estoy harto de ese niño!

—Hermano...—Fuyumi se sobresalto, Natuso se abrazo a ella.

La casi pelirroja miró el suelo, más precisamente a la leche esparciéndose, y luego a su mellizo, obviamente nada feliz.

—¡¿Que te sucede?!—Tomó el tazón del suelo.—¡Asustas a nuestros hermanos, tonto!

—¡¿Y eso que importa?!—Se le acercó, poniéndose frente a frente.—¡No eres nuestra mamá, no tienes que preocuparte por ellos, ni por ese bebé!

🔥❄️ ... 𝙃𝙚𝙧𝙢𝙖𝙣𝙖 𝙢𝙖𝙮𝙤𝙧! ||Todoroki family [BHNA]Where stories live. Discover now