Perdedoras (parte 3)

Comenzar desde el principio
                                    

¿Ya se te ocurre algo? .- preguntaba Owen.

Quizás, ese restaurante... ¡mierda!.- la pelirroja gritó abruptamente cuando un pequeño Pteranodon voló por encima de los dos para llegar a su nido ubicado en un edificio relativamente lejano.- Aún no me acostumbro a eso... Lo que iba a decirte es que vayamos a ese restaurante de ahí, me gustaría comer pasta.

Bien, vamos ahí entonces.- la pareja entró al lugar, ordenaron un platillo y conversaron.

Me encanta esto... .- Decía Claire masticando su lasaña.- No suelo hablar con la boca llena pero... Esto es una delicia.

Es claro que te gusta.- sonreía su esposo bebiendo de la gaseosa que les sirvieron en el restaurante.- Y eso me hace feliz.

Me está encantado todo de este viaje, lo estoy disfrutando enserio.- aclaraba la mujer.- Espero que Maisie también la esté pasando bien. ¿Crees que ella y Kayla se estén llevando bien?

Ojalá, no puedo imaginarme la idea de que ella la pase terrible mientras que nosotros hacemos el viaje.- confesaba el ex-marine.- Bueno, si puedo imaginarmelo pero me angustia hacerlo.

¿Te he dicho que amo verte como padre preocupado? .- Claire preguntaba con una tono suave.

Creo que algunas veces.- Owen contestó fingiendo desconocimiento.

Realmente habla mucho de como eres, Owen Grady.- su pareja mencionó.- Es gracias a ti que Maisie ha podido tener una mejor vida, llena de amor.

Fue gracias a los dos.- corrigió el castaño, obteniendo otra idea en mente.- Cielos...no puedo creer que haya crecido tanto. Era una niña hace unos años, en poco tiempo tendrá mi estatura.

¿Estarías bien con la idea de que ella tenga novio? .- Claire cuestionó.

¿Por qué preguntas eso? .- Owen se notaba un poco tenso.

No es por nada serio, es solo para saber.- Claire contó.- Maisie habló conmigo el otro día, me hizo algunas preguntas acerca de tener pareja, cosas básicas pero se detuvo cuando iba a hacerme una última pregunta, parecía muy importante.

Entonces crees que ella te iba a preguntar sobre lo que yo pensaría acerca de eso, ¿no? .- Owen deducía.

No me lo dijo directamente. Es una de mis opciones, y no veo una variedad amplía.- la pelirroja notó la inconformidad de su hombre.- Oye, Maisie siempre será tu princesa pero sabes que, aunque no te parezca la idea, ella querrá tener un chico con el cual compartir su vida. Es lo que hacemos los dos ahora mismo.

... No quiero que el chico que escoja la lastime, ella ya ha sufrido demasiado.- decía Owen.- Mi trabajo como padre es que mi hija esté bien y fuera de peligro.

Y lo estará, nos tiene a nosotros.- Claire tomaba la mano de su pareja.- La guiaremos para que escoja al correcto.

Eso sonó algo cursi.- opinó el castaño.

Lo sé, nunca puedo dejar de hacer eso.- reía la chica. El buen humor se mantuvo en los dos, el almuerzo continuó de esa agradable manera.

La pareja salió del restaurante, ahora verían que sería lo siguiente en su día.

¿Qué tal un helado? .- preguntaba Claire con claras intenciones de comer un poster de esa índole.

¿Quieres helado? Bien, un helado será.- accedía su esposo consintiendola.

Fueron alegremente hasta un pequeño conjunto de puestos de postres, entre ellos había uno con lo que querían. Claire se sentó en una mesa mientras que su esposo compraba.

La pelirroja ha disfrutado plácidamente todo el viaje, un momento de calma y tranquilidad junto al amor de su vida, esto es algo que ella quiso desde hace mucho pero que era incapaz de expresar. Volteaba a ver a todos los clientes que la rodeaban, todas las mesas estaban llenadas por familias, algunos tenían a bebés, un aspecto que le enternecia el corazón, sonreía al verlos.

Un niño pasó por la vereda llevando un camión de juguete con el que jugaba sin preocupación, tropezó ligeramente callendo de rodillas.

Oh, ¿estás bien? .- Claire se dispuso a auxiliar al pequeño con desinterés total

Si, gracias.- Dijo el niño en respuesta, no se veía asustado, más bien se veía agradecido por aquel solidario gesto.

Ten, cuídalo bien.- la mujer le devolvía aquel camión de juguete.- Y ten precaución la próxima...

¡Kenny, ven aquí! .- gritó una señora cercana a la edad de Claire, tomó al niño y lo apartó de la señora Grady.- ¡No te vuelvas a alejar!

Lo siento.- lamentaba Kenny con tristeza.

¡Y tú, no te le vuelvas a acercar! .- recriminaba la señora.

Disculpe yo no le hecho nada a su hijo, solo traté de ayudarlo.- Claire se sentía atacada e intimidada por los gritos de la otra persona.- Le juro que no querido lastimarlo.

No me venga con sus putas excusas.- la madre de Kenny se acercó demasiado a la pelirroja quien se sentía miedo.- Sé quién eres, sé perfectamente lo que hiciste hace años. Si mi hijo no tiene a su padre ahora mismo a su lado es gracias a tu negligencia.- La mujer se fue luego de eso junto a su niño.

Claire no era tonta, sabía que se refería al incidente de 2015, aquel suceso donde fue vista por todos como una persona sin corazón, la ocasión donde notó que su amor por los dinosaurios y demás animales se había esfumado por culpa de sus ambiciones. Lo único que hizo en este instante fue poner la cabeza baja y evitar emitir cualquier tipo de emoción.

Claire, ya tengo los... .- Owen volvía de haber comprado los helados, viendo a su esposa completamente triste.- ¿Amor?

Volvamos al hotel, por favor.- comentaba con dolor su amada.

Continuará...

Mundo Jurásico: JuntosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora