୭ ˚. confesión, confianza

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Sus pies la habían traído automáticamente hacia dónde se encontraba el rubio, agitada por correr tanto para alcanzarlo. Se posó alado de su compañero, poniendo su mano en su hombro haciendo que el otro se quedara parado en seco.

— Maldición, caminas muy rápido.— se paró un momento a tomar aire. El otro solo la veía con una expresión aburrida en el rostro esperando que quitara su sucia mano de su hombro.

— ¿Ahora que quieres? Ni siquiera fuera de la escuela dejas de jod—

— ¡Quería saber cómo estabas! También felicitarte por el primer lugar. Me desmayé y después ya no supe nada. ¿Tu mano está bien?

Ambos se miraron unos cortos segundos antes de que el desviara su mirada hacia su mano vendada, solo podía escuchar la respiración agitada de la chica enfrente suyo y el ruido de algunos carros que transitaban en ese momento.

— Sí.

Fue lo único que salió de su boca. Lo vió con intenciones de irse otra vez y quiso no insistir, pero entonces la voz del chico la sacó de sus pensamientos.

— ¿Te vas a quedar ahí parada?

Y supo que era una señal para que caminara junto a él.

Nunca se consideró una persona muy habladora, pero en ese momento era todo lo contrario. Hablaba de muchas cosas a la vez, sobre lo increíble de la fuerza de sus explosiones y como usar varios elementos a la vez la dejaba agotada. Aprovechó también para felicitarlo por su glorioso primer lugar, aunque parecía más molesto que satisfecho.

El chico a su lado no hizo más que escucharla, su expresión seguía seria como de costumbre. Extrañamente no quiso explotarle la cabeza por hablar tanto, de hecho sus pensamientos y atención se encontraban en otros lugares menos en lo que la chica le contaba muy felizmente.

— ¡Las llamas de Shoto también son muy fuertes! ¿Lo viste? Me encantaría ir a la agencia de su padre para poder controlar las mías de esa manera.

— ¿Después de una paliza te quedan tantas ganas de hablar?

— Me estás escuchando de todas maneras, no te veo quejándote.— lo miré de reojo como volteaba los ojos, una risa salió de mis labios.

— Como sea.

Ese fue el único que salió de su boca. Sonreí un poco, en todo el rato que llevaba hablando no había soltado ningún ruido o había pronunciado algo, solo sentía o negaba. Sabía que no era muy hablador y pensé que lo había fastidiado por estar hablando tanto, así que lo tomé como una oportunidad para guardar silencio.

Caminamos tranquilos, el sol se estaba poniendo dando paso a un hermoso atardecer. Ninguno de los dos dijo nada, disfrutando el ambiente tranquilo que se había creado de repente.

El día de hoy había sido más increíble de lo que había imaginado, había quedado de tercer lugar y además ¡Mi héroe favorito me había halagado!

No podía estar más emocionada al ver a All Might colocarme la medalla y halagarme por mis grandes habilidades.

Además, estaba feliz por todos mis amigos y en general de todos mis compañeros. Cada quien se había podido lucir a su manera lo cual era bueno y beneficioso para cada uno.

Recordé que tenía que pedirle su número al gruñón que caminaba alado mío, me había dado cuenta que no lo tenía y estuve apunto de abrir la boca cuando de repente...

— Oi, estamos caminando hacia mi casa y no te diste cuenta por mirar embobada al cielo.— me dijo con una voz cansada y monótona. Reconocí el camino, no era el que me llevaba a mi casa y entonces me sonroje de la vergüenza.

sun & moon!  ๋࣭ ⭑ katsuki bakugo !حيث تعيش القصص. اكتشف الآن