La gente se había ido subiendo a los coches y se habían ido trasladando a donde estaba la meta. Jenna, Lion y yo nos teníamos que quedar allí, solo que estos habían ido a buscar no se qué cosa al coche de mi amiga. Nicholas también había desaparecido, le había visto marcharse con la idiota de pelo oscuro hacia donde estaba su furgoneta, y allí estaba yo, solo, junto a un cochazo y esperando a que alguien regresase de una vez por todas.

Entonces vi como Ronnie se acercaba hacia su coche tuneado
y me observaba con interés. Aquel chico daba miedo de verdad, tenía más músculos que un luchador de sumo y miles de tatuajes marcaban sus brazos y parte de su espalda. Le observé sin emitir ningún tipo de sonido.

-Eh, guapo-me dijo apoyando sus antebrazos en la parte superior del coche.- ¿Quién eres?-me preguntó en tono divertido.

Li miré con cierto reparo pero decidí que era mejor contestarle.

-Gulf-le contesté cortante.

El sonrió por algún motivo inexplicable.

-Te he estado observando-me dijo con una sonrisa-Se diferenciar a los chicos que saben de esto-dijo dándole una palmada a su coche-y las que no-agregó

-Tú perteneces al primer grupo.

Observé con cautela.

-Puede que haya corrido una que otra vez-le contesté preguntándome donde estaban los demás.

No me gustaba la forma en la que me miraba aquel tipo, me daba mala espina.

-Lo sabía-me contestó divertido-¿Porqué no corres contra mí, cielo?-me preguntó, mirándome seriamente.

¿Estaba preguntándome lo que creía que estaba preguntándome?

-Tienes que correr contra Mew-le dije dubitativo.

-Mew no está aquí ¿verdad?-me preguntó haciendo un admeán con su mano.

Sentí como la adrenalina me invadía por completo. Dios mío.... Correr otra vez... eso era lo quería, lo que necesitaba...
y era verdad que Mew había desaparecido, además él ya había corrido...

Apagué aquella alarma que comenzó a sonar en mi cabeza, alertándome de que estaba completamente loca y sonreicon suficiencia.

-Acepto-le dije con una sonrisa.

Él me la devolvió con ganas.
-Estupendo, precioso-me dijo con los ojos brillándole de excitación-Nos vemos en la meta-agregó subiéndo: coche de un solo movimiento.

Sabía lo que pensaba. Pensaba que me ganaría con los ojos cerrados. Bien, querido Ronnie. Creo que se me ha olvidado informarte de que vas a correr contra el hijo de un ganador de Nascar.

Ese coche era una pasada. Los asientos eran de cuero, la caballería era impresionante y qué decir del aquel ronroneo de motor...mmmm que gustó y que recuerdos.

Puse el coche en marcha con facilidad y me acerqué hacia la línea de salida. Nadie sabía que era yo quien conducía, nadie excepto mi adversario.

Sonreí como un niño.

Allá vamos Ronnie tipo duro.

En cuanto los banderines dieron la señal de salida, pisé fuerte el acelerador y en menos de un segundo dejé atrás la

linea de salida. ¡Guau! Era impresionante, liberador, divertido, relajante, asombroso.... Lo mejor del mundo. Hacía años que no hacía nada parecido y por fin sentí que estaba haciendo algo por mí, algo que me gustaba, algo que no tenía nada que ver con mi madre, ni con su marido, ni con

Hermanatros (1)Where stories live. Discover now