Flores

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Juliette

- Esto es mucho - Deje mi cabeza caer en la mesa frustrada con mi tarea, tenia que hacer mi mejor esfuerzo para que mis estudios valieran la pena

Tome la foto familiar que tenia en mi escritorio, ya habían pasado mas de 4 años de la muerte de mis padres, cada dia los extrañaba aun mas pero se que ellos estarían orgullosos de la mujer que soy por ellos, tome nuevamente aquel lápiz amarillo y volví a concentrarme en aquello problemas matemáticos los cuales odiaba pero a la vez me generaban curiosidad.

El Clima empezaba a ponerse aun mas frio pero al recordar la sonrisa que me habia cautivado el dia de hoy me daba calidez, Charles Leclerc el principe de Ferrari y quien ahora se estaba robando mi corazón con tan solo horas de conocerlo.

Paso una hora cuando por fin di por terminada mi tarea de la semana y eso que solo era martes pero siempre trataba de finalizar mi tarea lo antes posible asi tendría mas tiempo para trabajar y descansar.

Me acurruqué debajo de las tibias sabanas mientras miraba las pequeñas estrellas fosforescente pegadas en el techo de mi habitación, cerré mis ojos y solo me deje guiar por el cansancio haciendo que cayera rápidamente en los brazos de Morfeo.

......

- Asi finalizaremos esta clase - Dijo el profesor haciendo que los estudiantes empezaran a recoger sus cosas inmediatamente

Tome mi rosada mochila para guardar mis libros y luego salir de aquel salon de clases directo a la salida de la universidad en donde me encontré con un frente frio y los estudiantes caminando de un lado a otro con cafes en sus manos.

- Charles ¿que haces aqui? - Pregunte mirando alrededor tratando de ser cautelosa y que nadie lo reconociera

- Mi abuela me dio la dirección de esta universidad y me dijo que una linda chica saldría a esta hora - Miro su reloj - Te resfriaras con este frio, ¿que tal si vamos por un cafe?

Al escuchar aquello mis mejillas empezaron a arder y sabia que me estaba sonrojando, jamas habia salido con un chico antes y no sabia como reaccionar asi que simplemente decidí aceptar, no entraba al trabajo hasta dentro de unas dos horas asi que aun tenia tiempo.

- Me parece bien - Sonrei timidamente y el enseguida abrió la puerta de su Ferrari para mi como todo un caballero

Las personas generalmente iban a Starbucks por un cafe caliente pero Charles me llevo a una cafeteria Francesa que fácilmente superaba a cualquier otra tienda de cafe, al entrar el olor a galletas invadió mis fosas nasales abriendo mi apetito inmediatamente.

- ¿Solo un cafe con leche? ¿No quieres una galleta? - Me pregunto tratando de convencerme y al final lo hizo asi que me decidi por una galleta de chocolate

- ¿Habías estado aqui antes? - Le pregunte curiosa ya que no muchos conocían esta deliciosa pastelería

- Cada vez que vengo a Nueva York paso por aqui, me encantan sus pasteles - Asintio para luego comer ansioso de su galleta - Mi abuela mencionó que estas estudiando derechos, ¿te gusta?

- Es una manera de sentirme cerca de mis padres, ellos murieron hace unos cuatro años - Tome mi vaso desechable con ambas manos saboreando aquel rico sabor del cafe con leche

- Oh lo siento mucho, no debi preguntar - Se disculpo rapidamente haciendo que aquel momento fuera tierno

- No, esta bien - Sonrei tranquila para no asustarlo - Cuando nos tropezamos enseguida te reconoci, pero supuse que querías tranquilidad

- ¿Enserio? podría jurar que pensé que no me reconocerías hasta anoche - Dijo sorprendido sacándome una ligera risa

- Entonces has estado aqui antes -Sonrei

Amor de veranoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora