La maldita no tendrá oportunidad de huir y le haré el favor a Atlas de que se pueda quedar hasta que encuentre a otra a quien hacerle la vida imposible. Después de lo Abel, a sus hermanos Belanger les cumplo lo que me pidan.

Me sostenía del brazo de mi hijo y la mano de Amina, mientras llegábamos a la zona de obstetricia. Sin duda, este hospital es el más enorme del mundo.

Llegamos a la recepción de la zona, la enfermera de mediana edad en el escritorio levanta su mirada castaña y acomoda sus anteojos para observarnos a cada uno.

—¿Son una relación poliamor o no saben de quién es el hijo?—Cuestiona con seriedad.

Jessica se acerca a escritorio.

—Diana viene hacer un ultrasonido—Le dice. —Te avisé por llamada, Cristyn.

—Atiendo a más de 100 omegas por día, Alfa Suprema, imposible que me acuerde de todos si no hablan— Parece regañarla, y Jessica parece acostumbrada. —¿Quién es la embarazada?

—Es ella—Dice Amina, tocándome el hombro.

Ahora su mirada y cara de culo se dirigen Amina, y alza una ceja.

—Ella puede hablar por si misma, gracias, Alfa.

—Soy yo—Le digo, me acerco al escritorio.—Diana Ayleen.

Revisa en la computadora y asiente.

—Será atendida por los doctores de turno, ahora mismo—Asegura.—Carlos Favre y Elisa Veltram.— Fruncí el ceño, y mi pecho se hunde de un miedo feo.—Puede pasar, sala 23.

Paso saliva y afirmo con la cabeza. Cuando estábamos a punto de cruzar la puerta, Cristyn carraspea con fuerza.

—¡¿Acaso las gloriosas e increíbles Alfas que todo lo pueden no saben leer?!—Cuestiona, señalando el enorme cartel impreso en las puertas de vidrio."La entrada está permitida solo a omegas" "LOS O LAS ALFAS NO ESTÁN PERMITIDOS" —No puede ir toda la camada ¿Qué les pasa?

Miro a las chicas, y luego a la enfermera, que se cruza de brazos y frunce los labios con aires de que nunca da su brazo a torcer.

—Haremos una excepción por hoy—Dice Jessica.

—Miércoles 15 de enero de 2003— Menciona con fuerza. Jessica suelta un gruñido. —Alfa le desgarra el cuello a un doctor por tocarle la barriga a su luna.

—Eso no pasará—Le asegura.

Me volteo a ver a Amina, y entre cierro mis ojos en sinónimo de advertencia. Ella esboza una media sonrisa, y asiente.

—Martes 8 de julio del 2003—Anuncia con ferocidad. —Una Alfa intenta llevarse a dos omegas porque sus hormonas de embarazo "La llamaban". Y esa misma tarde de ese mismo día, en la sala de parto, una alfa acaba con 2 doctores y 3 enfermeras por intentar sacar al cachorro por parto natural.

Jessica pone los ojos en blanco.

—Podría seguir toda la vida porque la lista es larga, pregúntenos a cualquier omega.—Ella me señala. —¿Cariño, has sido víctima de una Alfa y su comportamiento salvaje?

—Toda mi vida, señora—Soy honesta.

La enfermera sonríe con victoria y observa a Jessica.

—Si no quiere que mañana su castillo amanezca invadido de furiosas omegas exigiendo sus derechos, los que no sean omegas, se quedan aquí—Dice.—Y usted sabe que cuando estamos enojadas, no le damos más cachorros para convertir en soldados.

—Bien—Suelta Jessica de mala gana y nos hace retroceder a todos.

—¿Entonces quién la acompañara?—Pregunta Cyprian con preocupación.

Sword Onyx [3]Where stories live. Discover now