-10-

59 6 6
                                    

Eran Tsukishima y Yamaguchi, al verles, agarré del antebrazo a Hinata y salimos prácticamente corriendo a un lugar privado, no era por no querer estar con ellos pero quería y debía decirle la verdad al pelinaranja

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Eran Tsukishima y Yamaguchi, al verles, agarré del antebrazo a Hinata y salimos prácticamente corriendo a un lugar privado, no era por no querer estar con ellos pero quería y debía decirle la verdad al pelinaranja.

Nos dirigimos a un lugar más apartado, era una especie de camino de un bosque y no había tanta iluminación como en el otro lugar. Solté el antebrazo del chico y suspiré mirando a los lados por si había alguien.

—¿Qué pasa? Relájate, solo eran Tsukishima y Yamaguchi, ¿Por qué nos fuimos? —Dijo Hinata con confusión y una pizca de enfado.

—Yo.. tengo que contarte la verdad Hinata, no podría hacerlo con ellos ahí.. —Dije y el menor me miró más confuso que antes, ya no aparentaba enojo. —Seré breve, me gustas, desde el primer día en el que te vi cuando entré al pabellón de voleyball y Nishinoya nos presentó, te vi rematar y.. mi corazón latía bastante fuerte, te amo, no nos conocemos desde hace mucho tiempo pero quise reconocer que me gustas, no digo que tú también debas sentirlo, osea.. —Dije con bastante nerviosismo.

Al instante sentí los labios del ajeno sobre los míos.

Hinata me estaba besando.

Correspondí su beso con sutileza, no era un beso necesitado sino tranquilo. Nos separamos ligeramente y este sonríe, dando un salto para colocarse como un koala en mí cuerpo, para que no cayese lo agarré levantándolo un poco.

—¡Nunca pensé que lo dijeras tú! —Dice sonriendo y yo lo miré confundido. —Tenía pensado decírtelo, ¡Lo prometo! Pero se me olvidaba siempre o no encontraba el momento, no me odies, ¿Sí?

—¿Cómo voy a odiarte, tonto? —Dije con una sutil sonrisa y nos dimos un pequeño beso para después bajarlo, dejándolo en el suelo. Este me agarró de la mano y nos dirigimos nuevamente a la ciudad, me sentía totalmente lleno al haberme declarado al chico y a ver sido correspondido.

 Este me agarró de la mano y nos dirigimos nuevamente a la ciudad, me sentía totalmente lleno al haberme declarado al chico y a ver sido correspondido

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Relación secreta. Acordamos de que sólo supiesen nuestro grupo de amigos ya que aún no estábamos del todo preparados para aguantar los comentarios del resto, ya que, sabemos que Tsukishima y Yamaguchi pasaron por muchos insultos, aunque al primer mencionado no les importaba en lo más mínimo.

Remates al corazón Where stories live. Discover now