cita Cap-2

1.1K 141 17
                                    

-Max.. estas seguro de hacer eso?- preguntaba un inseguro Carlos al saber el plan de su amigo, pues, este no era muy ingenioso que digamos, dejaba mucho que desear en términos de citas -Sabes que te puedo ayudar, verdad?- intento una vez más el peli-negro a lo cual el rubio lo vio de reojo.

-Lo se Car, pero are lo que te dije, llegare con un antifaz, no quiero llegar con la mascara, pero tampoco quiero ir sin protección- volvió a repetir Max, mientras se arreglaba la corbata, pues hoy sería su "Cita" con el Coronel Sergio, al que todos llamaban "Checo" -No creo que me reconozca, ya paso tiempo desde la consulta q tuvimos- explicó el rubio quien veía desde el espejo a su amigo.

-Y si lleva a sus soldados?- pregunto Carlos levantándose de la cama, acercándose a su amigo para arreglarle mejor la corbata, cosa que el rubio agradeció -Que aras en ese momento?- pregunto de vuelta, terminando de arreglar ma corbata.

-Sabes que también llévate a mis hombres Carlos, no iré desprotegido- suspiro Max, entendía la inseguridad de Carlos, pero eso no permitiría que no asistiera a la "cita", el era un hombre de palabra, e iba a cumplir con la "cita" que el mismo había preparado-Además, Pierre estará encubierto por cualquier cosa- aseguro Max tratando de calmar a su hermano -Tu solo asegurarte que la carga que mandamos con Hamilton llegue bien- termino de decir antes de ponerse su saco.

-Esta bien- suspiro derrotado el Español, recargandose en la pared de la habitación de Max -Y porque yo tengo que asegurarme de la carga de Hamilton?- rodó los ojos mientras veía a Max ponerse su saco -Asegúrate tu- soltó mientras cerraba sus ojos y suspiraba.

-Sabes que no lo are, y sabes el porqué- respondió Max poniéndose colonia, veía a su amigo por el espejo mientras lo hacía.

-Pues ya que- soltó Carlos abriendo los ojos  -Yo te dije, pero no escuchaste- reprocho a su amigo- "No es bueno tener una relación entre socios" pero nunca haces caso- soltó el Español ganándose un gruñido por parte del rubio amigo.

-Borra esa etapa de tu vida Sainz- amenazó el rubio mientras buscaba su. Billetera, junto con sus tarjetas, mientras que el contrario solo soltó una risa lo que lo hizo gruñir.

-Pareces perro gruñendo- río su amigo.

























































-Que tal me veo?- pregunto el tapatío nervioso mientras se veía en el espejo por décima vez en la tarde, tendría una "Cita" con el hombre que lo pretendía, y no soy era quien lo pretendía, sino también era el mafioso más buscado, y para acabarla de cagar, era quien estaba a cargo de meterlo preso, pero que vueltas da la vida, ahora no estaba como el "Comandante Sergio", si no como Checo, el chico que esperaba con ansias cada detalle del "León Holandés".

-Que te vez bien Checo, llevas haciendo la misma pregunta desde hace horas- suspiro su amigo Charles, quien, bueno, el era elogiado con regalos de la mano derecha del "León Holandés", mejor conocido como "Chilli", quien le mandaba regalos cada semana, y no es como que el de ojos verdes se negara a los regalos, pues si eran de su agrado.

-Lo se!, pero quiero estar presentable, no todas las noches vas a una "Cita" con un mafioso, el cual es la persona que quieres meter tras las rejas mi buen Char- respondió el tapatío, terminando de arreglar su cabello, se estaba debatiendo si llevar el collar con la esmeralda, el gual fue el primer presente, o no llevarlo -Me queda o no me queda?- pregunto Checo a su amigo mientras se ponía el collar. A lo que su amigo lo vio con duda pero no dijo nada, solo veía como este se ponía el collar.

-Mm.. te vez mejor con el collar- respondió mientras levantaba los hombros, y se paraba de la cama caminando en dirección a una capital que tenía Checo, sacando de esta un anillo de esmeralda, la cual también se la había mandado el "León Holandés" -Pero con esta seria el conjunto perfecto- dijo Charles mostrándole el anillo, para luego ponerlo en el dedo índice de su amigo.

El tapatío respondió con un asentimiento de cabeza mientras dejaba que su amigo le pusiera el anillo, estaba nervioso?, si, al mil, estaba emocionado?, claro, pero no sabia porque.

Soltó un suspiro pesado mientras se volvía al espejo para ponerse un gloss brillante en tono rositas claro.
































Una limusina se estacionó en la entrada del edificio en el cual vivía Sergio, teniendo consigo de chófer a uno de los hombres de Max, quien ya sabía a quien iba a recoger y llevar al restaurante el cual reservo su jefe.

Vio como el tapatío que se suponía tenía que llevar al restaurante estaba saliendo del edificio, se dispuso a abrirle la puerta de la Limusina, así emprendiendo viaje a su destino, un restaurante elegante, con un toque de suspenso, el viaje fue tranquilo a decir verdad, el chófer veía hacia en frente y no soltó palabra durante el trayecto, a lo que Sergio agradeció internamente.

Al llegar al restaurante repitió la misma acción de hace unos minutos, le abrió la puerta al Sergio mientras esperaba que este bajara para así cerrarla cordialmente, viendo como su jefe llegaba a la entrada del restaurante con unas flores y un antifaz, cosa q lo hizo cuestionarse en silencio y bajar la cabeza cuando esté estuvo frente a él.

Sergio vio como el chófer agachaba la cabeza y vio al frente, topandose con un chico rubio, alto, bien vestido, de traje negro, con un ramo de rosas rojas, un antifaz negro y un ojos azules, se le hacían conocidos esos ojos, pues no cualquiera tendría ese brillo en los ojos, pero no recordaba de donde conocía esos ojos.

El rubio le sonrió de lado entregándole el ramo de rosas al tapatío quien agradeció el gesto, entraron al restaurante.

Llegando a la recepción el rubio habló con la recepcionista la cual ya tenia anotada su reservacion y gustosa los guió hasta su mesa designada, la cual tenía vista al mar y estaba en la terraza.

-Me alegra que haya hacendado mi invitación Comandante Sergio- habló Max con una voz un tanto gruesa, lo cual hacía siempre que estaba en el papel de mafioso, y no en el del simple doctor o el simple padre.

-Sergio!- soltó el de pecas al instante -Solo Sergio...- remendo soltando u a pequeña risa nerviosa.

-Bien Sergio..- sonrió el Rubio apartando la silla para que el menor tomara asiento en una de estas -Espero le agrade este lugar- soltó este mientras que el tapatío se sentaba.

-Es agradable- respondió el Tapatío tomando en sus manos el menú mientras que el rubio asentía y se sentaba del otro lado de la mesa quedando frente al tapatío.

-Me alegra escuchar eso Sergio- habló el rubio mientras leía el menú que ya había en sus manos.

>Rebe<

Los dejo, mañana QUIZA, suba el resto, tengo sueño, chaito, espero les guste este cap:]

zwei Welten || Chesteppen Where stories live. Discover now