Todos Putos

resaca

pt 2 de "declaración"

9:21 am.

Agustín se levantó con una impresionante resaca, no sabía que había pasado la noche anterior, hasta que volteó a su lado y lo vio. Ahí recordó todo. No quería despertarlo, asi que solo se acostó otra vez, lo abrazó y se quedó mirándolo y apreciando cada detalle de su cara, como romeo admirando a julieta.

<<que lindo morocho, dios>> pensó agustín. El sonrío, realmente estaba feliz por el chico que tiene, no podria tener palabras para describir lo hermoso y tierno que se ve claudio a sus ojos. Es algo sumamente inexplicable.

Ruberto estaba admirando a su novio tranquilamente hasta que este empezó a abrir sus ojitos lentamente.

-buen día, amor, como dormiste?

-e-? mi amor? que pasó? quién sos vos?- claudio, el cual recién había despertado y tenía la lagaña pegada al ojo, no entendía nada de lo que le había dicho agustín.

Agustín río.- ay pelotudo tas' re mal, el alcohol te re pego y creo que más que a mi wacho

echeverri se quedó recalculando todo, desde que había pasado anoche hasta como mierda termino con un dolor inmenso de caderas y desnudo junto con agustín. Unos segundos despues se acordó todo lo que había hecho y había pasado. Su cara se puso más roja que el tomate, así que se escondió en el cuello del más alto por la verguenza que tenía en ese instante.

- pelotudo- dijo de la nada.

-que decís putita y que haces con tu cara en mi cue... ahh ya te acordaste no eche?- el delantero rio más fuerte.- ya te  acordaste de como me pedias que te coja más rapid- AY!- agustín fue interrumpido por la fuerte mordida que le proporcionó echeverri en su cuello, la cual le hizo doler mucho.

-aaayyy eso me dolió estupidoooooooooooo

-ñeñeñeñe, mas me duele a mi las caderas, sabrá dios si mañana puedo ir a entrenar

-o peor, si te podrás levantar ahora- sonrío agustín.

-te odio

-decime asi una vez más y hago lo que le dije anoche eh, mira que yo no tengo problema en que me montes la verga- AY! ¡CLAUDIOO!- otra vez fue golpeado por su pareja. esta vez, ambos rieron.

-bueno bueno pero callate que quiero dormir, tengo sueño todavia

-bueno hace lo que quieras yo me voy- antes de que agustín se pudiera levantar del todo su pareja se lo impidió agarrandolo de las manos y haciendo que se termine sentando otra vez en la cama.

-no, veni quedate conmigo, porfa no me dejes acá- claudio le pedía que se quede, al parecer porque no quería estar solo.

-si me decís mi amor hago lo que vos quieras

- mi amor, porfavor podrias quedarte aca conmigo un ratito más?- ruberto le obedeció el pedido a echeverri y se acostó otra vez abrazandolo y poniendo una de sus manos en su cintura y la otra en su culo, masajeandolo sutilmente.

- agus- llamó.

-mmh?

- te amo- le susurró claudio.

le dedicó una sonrisa además de esas palabras que hicieron emocionar a agustín, el cuál de tanta emoción lo agarró y lo abrazo con mucha mas fuerza felizmente.

-yo tambien te amo mi amor

-mi amor.. decime más asi, me gusta- echeverri le dijo con un poco de vergüenza.

-bueno mi amor, te amo

-yo también

-mucho?

-demasiado

Despues de esas tiernas palabras los chicos del millonario se dedicaron a darse cariños mutuos hasta que se volvieron a dormir, disfrutando del calor del otro.

11:54 pm

Luego de un par de horitas más de sueño, esta ves el primero en despertar fue claudio el cuál se separó del abrazo que lo unía a su morocho e intentó levantarse de la cama.
mala idea porque sus piernas estaban muy flagidas y terminó callendose de rodillas al piso, aún así agustín no se desperto Asi que sin querer pedirle ayuda a el, claudio se volvió a levantar y esta vez con un poco más de fuerza pudo caminar lentamente hacía el baño, en donde se dio cuenta de todas las marcas que le había hecho agustín por el pequeño cuerpo.

Luego de haber tenido su primera vez se durmieron solamente 15 minutos y al parecer despertaron con ganas de más, ya que luego de despertar tuvieron otras 6 rondas más y su cuerpo estaba completamente marcado por los chupetones, mordidas, besos y más cosas que había recibido de parte de su pareja.

Mentiria si dijera que no le gustaba, más bien le encantaba estar todo marcado por su chico, pero su cuerpo estaba pidiendo ser ayudado con por lo menos un bañito de agua caliente, estaba completamente exhausto.

despues de hacer sus necesidades volvió como pudo hacía la habitación, eligió un boxer y una camiseta de el dueño del hogar y se metió a bañar otra vez para relajarse un poco.

Claudio estaba tan metido en su mundo, disfrutando bastante el agua caliente que ni se entero que alguien había entrado al baño y a la ducha.

-clau

- AAY, ¡CONCHUDO!, como mierda entraste que yo no te escuche- agustín se rió porque había cumplido su objetivo: asustar a echeverri.

-yy e' secreto capo, pero ahora raja que me toca a mi bañarme ahora

-y no podias esperar afuera, nosee digoo viste- echeverri le decía mientras salía de la ducha.

-nop

El diablito suspiró.- a veces pareces un nene chiquito

- TU nene chiquito, en todo caso de que lo parezca mi amor, deci bien las cosas- remarcó el delantero.

-te amo

Luego de unos minutos, ruberto se terminó de bañar y fue hasta la cocina donde se encontraba su novio poniendo a calentar el agua para unos mates.

- al final si que podías caminar eh, viste ni fui tan duro

- que no fuiste duro la concha de tu madre me duele hasta el alma

- pero admiti que te gusto, puto

- si pero igual, me duele todo el orto y los muslos la concha de tu vieja

agustin se acercó y le dio un fuerte nalgada.

-pero con tan bestialidad de culito es imposible no hacerle algo, y con esos muslitos lo mismo mi amor, esa carne alguien la tiene que comer- se justificaba agustin.- aparte el nutri dijo que hay que mantenerse nutrido y para eso hay que comer carne- se escogía de hombros.

-sisi lo que quieras, callate y pedi unas facturas pa' come' que tengo ganas, hace mucho no morfo unas facturitas

Agustín le cedió el capricho a claudio y pidió las facturas.

Y asi siguio su primer dia como novios, jugando, claudio retando a agustín, limpiando la casa mientras cantaban algo de cumbia. Pasando el rato juntos.

Un domingo al estilo argentino.

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