8

147 26 12
                                    

Llevaba ya semanas sin poder estar sola, me encontraba en constante movimiento, de la casa de los Kent a la de los Walker

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Llevaba ya semanas sin poder estar sola, me encontraba en constante movimiento, de la casa de los Kent a la de los Walker. Ryan llevaba demasiado tiempo sin comunicarse conmigo, lo que me había hecho sentir cada día más sola, por lo que pasar tiempo con ellos me hacía sentir mejor. Mi padre estaba nuevamente de viaje por negocios, no me atreví a pedirle que se quedara conmigo, me hacía sentir como una malagradecida, sabiendo el enorme esfuerzo que él hacía por separarse siempre de mi.

-Sabes, si sigues batiendo esa mezcla, terminara siendo licuado en lugar de panqueques -se burló Clark, quien estaba sentada frente a mi en la barra de su casa

Su madre, quien pasaba por detrás de él le dió un golpe en la parte posterior de la cabeza, sabiendo que la estaba pasando bastante mal y no estaba para bromas.

-Sabes, si sigues criticando, no te daré ni un solo panqueque que haga. Me los comeré frente a ti y me verás disfrutarlos -le amenacé, con el cansancio que me cargaba, no podía ni pensar en una buena forma de burlarme de él

Él intento seguir con sus burlas, pero la mirada de su madre le hizo callar, sabiendo perfectamente lo que pasaría si la hacia enojar.

Mi celular sonó, deje de inmediato todo lo que estaba haciendo deseando que fuera Ryan de una vez por todas, el detector de llamadas salía en privado.

-¿Hola? -pregunté sin mucho entusiasmo, decepcionada de que no fuera el número de mi Ángel Guardián

Pero no estaba preparada para lo que pasaría, ni en mis más remotas pesadillas pensaría que algo así realmente pudiera pasar.

-Grace, tienes que ayudarme -la voz totalmente asustada de Ryan me puso alerta

-Ryan... -fue lo único que salió de mis labios, un susurro mientras me aferraba a mi celular

Me perdí la mirada de mi amigo y su madre, pero ante su suspiro, pude identificar que estaban felices.

-Tienes que sacarme de aquí -me suplicó, a lo que de inmediato me alteré

-Dime dónde estás -le exigí de inmediato, estaba dispuesta a ir a buscarlo dónde sea

-En un hospital llamando Summerholt. Por favor, Grace. Sácame de aquí. Por favor -respondió obediente

Mi corazón se rompió tan pronto lo escuché suplicar, nunca en mi vida lo había escuchado tan atemorizado, me sentía tan culpable en ese momento. Lo que siguió fue algo para lo que realmente nunca me prepare, un poco de forcejeo, unas voces masculinas de fondo, lo escuché gritar mi más grande temor...

-¡Hacen experimentos conmigo!

-¡Ryan! -grite preocupada de inmediato

-¡Déjenme! ¡Ayúdame, Grace! ¡No, no! -su voz del otro lado se escuchaba tan lastimada, temerosa y realmente dolida

𝐒𝐌𝐀𝐋𝐋𝐕𝐈𝐋𝐋𝐄Where stories live. Discover now