el Mijito rico del 2°B

fin probablemente

Al terminar la clase, salí rapidito para no toparme con el Piero porque iba a cachar de una que iba a ver al basti

X: pa dónde vamos tan rápido mí amor

Puta la wea, me di la vuelta y lo quedé mirando sin saber qué decir

Piero: Aaaaa, ya cacho donde quiere ir, y de una le digo que no le doy permiso -Me agarró fuerte la mano y empezó a caminar llevándome a la fuerza

Jes: Voy a salir con el Tomi -Me mentí

Piero: A si?, que bueno y pa dónde? - me quedé mirando a la nada tratando de pensar una escusa-, ve, no trate de mentirme a mi porque no lo va alograrlo.

Jes: Déjame piola porfa, tengo que ir a verlo -me trate de soltar pero me agarró más fuerte-, Oye en vola para tu wea, no logras nada así, estai puro logrando alejarme.

Piero:Oka, perdoneme, ¿Empecemos de nuevo? Porfavor.

Jesús: Ya me di cuenta de cómo eres, no tengo interés en estar en algo con alguien como tú -nuevamente trate de irme y nuevamente no lo logré- ¿Que quieres Weon? Te acabo de decir que no.

Piero: Esa es la wea po, que a mí nadie me dice que no -Me dio un beso.

Jesús: Weon tú estás cagandote de la risa de las weas que te estoy diciendo y es de lo más en serio lo que te estoy diciendo, no te quiero cerca, no quiero estar contigo, de echo para mí no tení niun brillo -Me soltó y me quedo mirando serio-, ahora, te agradecería que dejes de wearme y me dejes en paz.

Me di la vuelta y me fui, tome colectivo y me fui directo al hospital. Preguntándome si estuve bien diciéndole todas esas weas al Piero y pensando en que tal vez el solo estaba muy ilusionado y yo lo trate muy mal.

Deje de pensar en esas weas cuando le pague al señor del colectivo y  camine al hospital.

Después de un rato buscando encontré a la mamá del Bastian  con una cara de pena y solita.

Jesús: Hola tía -la saludé feliz

Ella sonrió apenas me vio

Tía Jessica: Hola Mijito - se paró y me abrazo fuerte-, cómo está  cariño que hace aquí?

Jes: Hola tía, la vine a ver, a usted y al basti obviamente, ¿Como está usted?, ¿Como está el? -e pregunté tomándole las manos.

Tía Jessica: Ya despertó, está mejor, estamos mejor, solo que me da mucha pena ver aquí a mi hijo, el nunca le hace nada a nadie y, y, y me duele que -no pudo seguir hablando porque se puso a llorar.

Estuve consolando la como 15 minutos pero quedó con los ojos muy rojos cuando nos llamó el doctor.

Doctor: Familiares de Bastian Rojas.

Tía Jessica: Hijo me hace un favor -Me Tomo las manos-, ¿Puede pasar usted? No quiero que mi hijo me vea así de derrotada, porfavor.

Jesús: Por supuesto tía, yo paso sin problema.

Seguí al doctor y cuando entre ahí estaba el en la camilla, me miró con el ceño fruncido y haciéndome así ✌️mientras me miraba confundido.

Bastian:¿Y Boston?

Jesús: No puedo venir acaso - me senté en la silla que estaba al lado de la camilla.

Bastian: Yo Feli con que esti aquí la wea es que me van a sacar la chucha sipo -se río.

Jesús: perdoname hermano, no pensé que iba a pasar esta wea.

Bastian: Tranqui ooo, si no estoy enojado con vo, toy enojao con tu caga de pololito que teni -le iba a decir algo pero se apresuró en responfer- y no me vengas con que no son nada mira que me saco la chucha por puro que me acerque a ti.

Jesús: en vola no somos nada, menos ahora que lo mandé a la chucha porque no quería que te viniera a ver -tome su mano-, perdoname porfa.

Bastian: y dale con el perdón, ven a darme un abrazo mejor si tan machucao no estoy.

Me levanté feliz y le di un abrazo bien fuerte.

Bastian: Calmao, no estoy tan machucao pero estoy machucao igual -se río.

Jesús: Ay perdón -lo solté y me volví a sentar tomando su mano.

Ahí nos quedamos hablando harto rato hasta que dieron las 9.

Jesús: Hermano creo que yo ya me tengo que ir, toy cagao de sueño -dije mientras me paraba de la silla.

Nos despedimos y entro su mamá, cuando ya me despedí de ambos y salí del hospital, iba a cruzar a la calle de adelante cuando un V16 morado que venía con la música más ordinaria posible a todo volumen y un motor que parecía que estaba a punto de reventar de lo fuerte que sonaba la wea, paro enfrente mío casi chocandome.

-Subete.

Una voz que conocía hablo dentro del auto, supe de inmediato quien era pero fue raro, la voz fue muy fría y cortante, diría que hasta pesada.

-Subete a la esa luego Jesús si no queri que me dé la wea.