Historia de una historia

1.

Es un frío día de Diciembre. Llueve. Hay una niebla espesa que impide ver más allá de 5 metros. Él llega a la estación de tren. Su reloj marca las 7:09, suspira aliviado, ha llegado a tiempo. Se dirige lentamente hacia la ventanilla a comprar el billete. Todo ha salido como él esperaba, no hay cola en la ventanilla, ahora se dirige hacia la cafetería y allí, se pide un café. Espera tranquilamente la llegada del tren.
Ella, en cambio, llega tarde. Mira su reloj y, joder, el tren sale en menos de 5 minutos. Se maldice una y otra vez. Odia ser tan despistada, pero es algo que por mucho que lo intenta, no es capaz de remediar. Corre por la estación lo más rápido que puede. No puede creer lo que ven sus ojos. Una larga cola de gente espera su turno para comprar su billete. Se vuelve a maldecir. Desearía volver atrás en su vida y eliminar el maldito día en que se volvió tan despistada. Vuelve a mirar el reloj, su corazón se acelera por momentos. No puede llegar tarde, su puesto de trabajo peligra. Desesperada, se ve obligada a pedir permiso para poder colarse.

7:33 de la mañana. Hoy el tren se está retrasando pero, pronto, los dos sabrán que, hoy, sus vidas cambiarán.