𝑻𝑯𝑬 𝑳𝑰𝑮𝑯𝑻 - 𝐷𝑎𝑛𝑖𝑙𝑜 𝑆𝑎𝑛𝑐ℎ𝑒𝑧

--𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐓𝐄𝐍--

Dispuesto a Todo por Ella

VALENTINA

Estos seis días estuve planeando mis XV, faltaba poco más de un mes, y tenía que estar todo perfecto.
Mi vestido era hermoso, era un tono rosa pastel, también tenía una coronita de quinceañera. Estaba casi todo listo, ya sabía a quien invitar, hasta había agragado a algunos chicos de Fuerte Apache.

Era hora de ir al colegio, estos días me estaba vistiendo diferente, quería probar un estilo nuevo, no me gustaba mucho, pero por lo menos una semana lo usaría, luego volvería a mi estilo habitual.

Estaba yendo con Nina al colegio, yo le contaba lo emocionada que estaba por mi fiesta, y ella también estaba emocionada por estar invitada. Hoy repartiré las invitaciones en Fuerte Apache, en Palermo se había encargado Lourdes, mi madre.

Al llegar al colegio, nos dijeron que había faltado el profesor de matemáticas, me alegré bastante, ya qué era la materia que teníamos a primera hora, y lo último que quería era estresarme.

Fuí al baño y me lave las manos, no había nadie en el, ya que Nina había ido a buscar sus libros al loker.

Al salir del baño, vi a mi primo entrar misteriosamente al baño de hombres, el miraba a todos lados fijándose que nadie lo viera. Sabía que el había probado la droga en un pasado por malas compañías, así que no iba a dejar que le pasara algo.

No habían profesores en el camino, así que fuí directamente al baño de hombres y me dirigí a mi primo quien estaba en el lavamanos.

—¿Que haces acá, Amaia? —Preguntaba el escondiendo algo detrás suyo—.

—¡Me decís ahora mismo que escondes, Nicolás! —Preguntaba enojada—.

—No tengo nada, tranquilízate. —Decía un poco nervioso—.

Me acerqué más a el y comencé a revisar sus ojos, los cuales estaban normales, no habían señales de que haya ingerido nada del otro mundo.

—Ta, ya me tranquilice, pero decime que escondes. —Insistía—.

El me da una cajita con un collar donde ponía el nombre “Nina”

—Ohh… ya entiendo todo. —Ahora todo cuadraba, no me quería mostrar por que era para mi amiga, entonces tenía miedo que le contará— Sabes que podes confiar en mi, ¿verdad Nick? —Le dije con una sonrisa y el asintió con la cabeza, le devolví la caja y despeiné su pelo con mi mano, luego salí del baño de hombres—.

Al salir me choqué con un chico bastante atractivo, y parecía unos pocos años mayor que yo.

—Disculpa, fue mi culpa. —Decía el chico con un acento normal—.

—No, fue la mía, perdóname. —Le respondía—.

—¿Sos de por acá vos? —Me preguntó el chico—.

—Soy de Palermo en realidad, estoy viviendo acá por un tiempo. —Le conté—.

—Mira que bien, yo nací en Italia pero también me fuí a vivir a Palermo.

—¿Enserió? ¿Y como te llamas?

—Ruggero Constantini, ¿y vos?

—Amaia Ivanova, pero decime Valentina. Acá me conocen así. —Dije con una sonrisa y el asintió—.

—¿Bulgaria?

—Mis abuelos, ellos son de allá.

—Sos muy linda, Valen, un gusto conocerte.