-HUYENDO- (Hunter x Hunter)

~1~

No sé si da más miedo el lugar en el que estábamos, todo lleno de telarañas, escombros y suciedad; o el imponente grupo de personas que se muestra ante mi. Todos mirándome como si fuese un espécimen expuesto en un zoológico, recién importado que alguna parte recóndita del mundo.

Trago saliva, nerviosa, mientras me remuevo sobre la piedra donde me han ordenado sentarme y, por mi propio bien, no moverme ni un milímetro.

Difícil veo que te quedes quieta más de dos segundos seguidos.

Ni caso, conciencia de mierda. Tu y yo no somos amigas.

Llevo bastantes horas conviviendo con esta gente, pero aún no asimilo que, literalmente, me hayan secuestrado para traerme a este mugriento lugar. Y, por más que pregunto, nadie me da explicaciones.

He de admitir que quitando el transporte hasta donde quiera que estemos, los pocos miembros de esta banda criminal que he conocido hasta la fecha han sido "agradables" conmigo, si es que me puedo referir de alguna manera decente a ellos.

9 horas antes...

Todo se vuelve negro, la respiración se me entrecorta aún más de lo que ya estaba y mis pies abandonan el suelo firme.

Mierda. Me llevan.

Puta vida.

—Date prisa— dice el que me lleva, a quien a partir de ahora me referiré como hijo de la gran puta—. Quiero salir cuanto antes de este cuarto rosa de niña pija.

¡¿Niña pija?!

—Admite que tiene su encanto. Es adecuado para una niña de su edad.

—¿Cuántos años has dicho que tenía?

—Once, camino de los doce.

Mi cumple es exactamente dentro de cinco días, pero no creo que el dato les interese mucho.

Joder, voy a pasar mi cumple quien sabe donde, mentalmente muerta y en compañía de secuestradores de "niñas pijas".

El mejor regalo que me podrían haber hecho.

Lo que parece una eternidad más tarde y varios comentarios más sobre lo feo que les parece mi casa, por fin noto como empezamos a movernos. O más bien, a volar, porque volamos.

Los dos hombres saltan por la ventana sin pararase a pensarlo mucho. Al tocar suelo, noto mi cerebro rebotar contra las paredes internas de mi cabeza. Ojalá no me hayan dejado ningún daño permanente.

Más mal no te pueden dejar.

Aish.

Empezamos a movernos de nuevo, a gran velocidad. Creo que están corriendo. Miro hacia abajo, la poca luz que se filtra desde el orificio de apertura de la bolsa me ayuda a saber más o menos por donde vamos.

Llevo viendo este suelo desde que nací, lo reconocería solo con tocarlo.

—Todavía no logró entender por qué el jefe se ha obsesionado tanto con la niña— comenta el hombre que me lleva, el hijo de puta de facciones delicadas.

—Machi, Franklin, tu y yo hemos sido los que más información hemos recibido sobre la misión de secuestro, pero se nos ha informado poquísimo— dice el otro hombre. ¿Cómo puede un secuestrador tener una voz tan sumamente dulce? ¡¿En qué cabeza cabe?!—. Pero bueno, ¿qué le vamos a hacer? Las órdenes son las órdenes.

Ya claro. No es a tí a quién están secuestrando.

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Holaaaaas.
He estado malita 😔 y por eso no había subido nada.
Este capítulo no es el mejor, pero a partir de ahora se vienen muchas más cosas.
Gracias por el apoyo 🫶🫶

Atte.

Mar 💗