0 8

394 50 16
                                    

Oriana

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Oriana

— Perdón, Ori. No te das una idea lo mucho que me arrepiento de todo.

Sentí cómo mi cuerpo se tensaba al escuchar esas palabras. Lentamente, dirigí mi mirada hacia él, observando su rostro lleno de arrepentimiento y culpa.
Por unos segundos, me sentí mal yo al verlo así, pero al recordar lo mal que, en su momento, lo había pasado por su culpa, solo asentí recibiendo sus disculpas.

— Fui un boludo, hice todo mal, y entiendo tu enojo. — Me explicó sin dejar de mirarme. Había sinceridad en sus ojos, pero yo no le creía. Y no le iba a creer nunca más, como le creí todo en su momento.

De repente, sentí como su mano agarraba la mía. Quise alejarme de su agarre, pero al verlo tan vulnerable, no pude hacerlo.

— Si sabías que hiciste todo mal, ¿Por que esperaste hasta ahora para pedirme perdón? — Hablé después de varios minutos sin hablar. Enzo me miró por unos segundos, y sin dudar me respondió.

— Vergüenza. — Respondió sin más, empezando a dejar una caricia en mi mano. — Cuándo me mandaste ese mensaje, recordándome lo inmaduro que era para mi edad... Nunca sentí tanta vergüenza de mi mismo.

Si, había mandado mensajes descargando mi bronca cuando Enzo me bloqueo por Instagram y WhatsApp. Nunca recibí respuesta, pero sabía que los había visto.
En un momento llegué a arrepentirme, en la actualidad lo veía como una manera de desahogarme al no haber tenido la oportunidad porque Enzo había desaparecido de la nada.

— ¿Te gustó ilusionarme? ¿Fue divertido? — Mantuve mi expresión neutral. No mostraba ninguna emoción en ese momento. Sabía que tendría la libertad de expresar mis sentimientos una vez llegara a casa.

— No fue mi intención ilusionarte, Ori. — Me prometió, soltando mi mano para sujetarla con más fuerza, como si temiera que me escapara. — Nunca mentí acerca de lo que sentía, de verdad estaba enamorado.

Un nudo se formó en mi estómago. Las náuseas volvieron a aparecer. Quería creerle; su rostro reflejaba sinceridad, pero no podía.

— ¿Entonces por qué volviste con ella? ¿Por qué me mentiste, jurando que no podías estar conmigo por la pelicula, pero sí pudiste estar con ella? ¿Por que no me elegiste a mi? — Aunque no había querido mostrarlo, el enojo empezaba notarse en mi tono de voz.

— Lo de película no fue una mentira. Estuve un poco más de un año viviendo en España por las grabaciones y yo no quería, ni podía, estar en una relación a distancia con vos. — Explicó mientras volvía a acariciar el dorso de mi mano, manteniendo su mirada ahí, donde sus dedos podían tener contacto con mi piel. — Y no volví con Sofia, no fue nada serio, y no significo nada para mí. Solamente nos encontramos un par de veces, y cuando quedé para 'La sociedad de la nieve' no volvi a verla nunca más. No estoy orgulloso de decirlo, pero estuve con ella para intentar olvidarte.

𝗢𝗻𝗲 𝗱𝗮𝘆 (un día) | Enzo Vogrincic Where stories live. Discover now