𝐴𝑙𝑙 𝑀𝑖𝑛𝑒 - 𝐸𝑛𝑧𝑜 𝑉𝑜𝑟𝑔𝑖𝑛𝑐𝑖𝑐

𝐜𝐡𝐚𝐩𝐭𝐞𝐫 𝐭𝐰𝐨

𝐌𝐚𝐢𝐚

- no sé que mierda hacer boluda, y eso que recién llevo una semana en España - dije mientras miraba el techo de la habitación del hotel

- ¿y si buscas un novio? - sugirió mi amiga

- vos estás loca, medicate - respondí mientras me reía

- ¿y que más podés hacer en España? - pregunto nuevamente la chica

- nada. necesito más drama en mi vida - dije para prender la televisión y buscar algún canal interesante

- ¿hay algún Starbucks o Mcdonald's cerca? - pregunto la chica haciendo que Maia se pare rapido de la cama

- mierda, la anemia pega fuerte - dije mientras me sostenía de la pared por haberme parado muy rápido

- ¿estás bien boluda? - pregunto preocupada mi amiguita

- sisi, de hecho me gusta tu idea. después hablamos, no te mueras - dije para cortar la llamada y salir del hotel con el celular en Google maps

quince minutos después seguía intentando encontrar el Starbucks que indica Google maps

- ¡¿por qué mierda esto es tan complicado?! - pregunté en un grito mientras doblaba en una esquina haciendo que la gente me mire

- eso me pasa por querer caminar y hacerme la saludable - hable para mí misma mientras levantaba la vista del celular y veía el Starbuck adelante mío

- ¡bingo! soy una genia - dije contenta mientras entraba al local y veía toda la variedad de bebidas

- ¿que se supone que pida ahora? nunca en mi vida vine a un Starbucks, esto es muy nuevo para mi... - opte por pedirle que mejor nombre tenga

me estaba dirigiendo a la salida cuando alguien choco conmigo y tiro mi café al suelo

- ¡mi café! - exclamé mientras veía mis zapatillas teñidas de marrón para luego mirar a la persona que me había chocado

- uy perdón, si querés te puedo comprar otro - hablo el chico que me había encontrado hace unos días en la farmacia

- para la próxima fíjate por dónde vas - dije enojada mientras empezaba a caminar en dirección a la salida hasta que el señor me agarró del brazo

- no no, yo lo tire, déjame comprarte
otro - insistió el hombre con una pequeña sonrisa

- si bueno, está bien - acepte para dirigirme nuevamente a la caja pero está vez acompañada

un rato después tenía nuevamente mi bebida pero a diferencia ahora tenía a un señor lindo al lado

- el otro dia pensé que estabas por tomar anticonceptivos y yo... - el hombre iba a terminar la oración pero lo corte con el ruido de la silla

- me tengo que ir - conteste lo más cortante posible para salir rápidamente del local

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