⚔️DK⚔️

59 2 0
                                    

Ciertamente, era un día especial; y lo digo de esta manera porque, vaya, no consideraba mi cumpleaños como una fecha que resultase tan importante.

Mis tíos junto a mi mamá organizaron una cena para celebrarme.

Mis tíos rodeaban la mesa mientras jugábamos cartas; mis tías y mamá, por otro lado, estaban en la cocina esperando a que la comida estuviese lista. Acaba de ganar una ronda de nuevo, dejando a mis tíos en la pobreza.

Mi celular vibró un par de veces, por lo que obviamente lo tomé para mirar al responsable de la insistencia.

Escuché mi nombre, aunque no hice caso mientras leía con atención. Uno de mis tíos golpeó la mesa llamando mi atención y ocasionando un brinco de mi parte.

—¿Sigues jugando o vas a ver tu teléfono?

Busco con la mirada la carta y veo mi mano. Justo lo que necesitaba para ganar.

Bajo mis cartas y todos comienzan a quejarse ocasionando mi risa. Desbloqueo de nueva cuenta el celular y leo atentamente mientras ellos barajean y reparten una nueva ronda.

"Por favor no te enojes..."
"De verdad no sabes cuanto
desearía poder acompañarte
hoy, pero ya sabes como es
el trabajo..."
"Perdón:("
"?"
"¿Hola?"
"🥺🥺🥺"
"Vamos a empezar a grabar,
dime algo 🥺"

Rio por lo bajo, escuchando en mi mente el tono que usó para escribir ese mensaje. Rápidamente escribo mi respuesta mientras me entregan mis cartas.

"No estoy enojada"
"No sé hacer eso cuando se
trata de ti"
"Yo lo entiendo... y sé que te
esfuerzas mucho, créeme
que eso es lo que más valoro
y admiro de ti"
"Espera"
"Llevo 7 victorias consecutivas"
"Voy por la octava"

El juego comienza. Esta vez mi mano no es tan buena, pero antes de que pueda quedar en ridículo, tocan a la puerta. Obviamente nadie quiere abrir. Onvrez tenían que ser.

—Yo digo, que ______ vaya. Por no estar al pendiente del juego.— por supuesto el resto comenzaron a apoyarlo. Rodé los ojos levantándome de la mesa y dejando en evidencia mi mala mano.

Salgo del comedor, cruzo el pasillo y finalmente llego a la puerta. Abro aún mirando abajo, y cuando me dispongo a buscar el rostro de la persona que tocaba, me encuentro con esa hermosa sonrisa que iluminaba mis días.

¿¡Cómo era posible que un simple mortal tuviese una sonrisa tan perfecta como esa?!

Por alguna razón, no estaba reaccionando. Seguro mi rostro era una completa cara de confusión y eso fue lo que ocasionó su risa.

—Oye, por lo menos abrázame, ¿no?— dijo extendiendo los brazos y se acercó atrapándome entre estos.

Mi mente aún trataba de carburar.

"... no sabes cuanto desearía poder acompañarte..."
"Vamos a empezar a grabar..."

—¡Me mentiste!— me quejo golpeando levemente su espalda, a lo que él rie y me aprieta más fuerte contra él; yo hago lo mismo.

—Debía si quería que esto fuera una sorpresa.— dice besando mi sien repetidas veces junto a la palabra "perdón" me mira y toma mis manos —No quiero importunar, pero... quiero pasar por lo menos tú noche de cumpleaños contigo.

Estoy emocionada y no puedo evitar dar brinquitos con él.  Pero el hecho de que esté aquí implica un largo viaje. Hice preguntas sobre como estuvo el viaje, si tuvo problemas para llegar a la casa y demás. En eso, recuerdo que seguimos en la puerta.

GOING SHOTSTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon