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LOS PERIÓDICOS volaban puerta por puerta para recibir las noticias de la semana

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LOS PERIÓDICOS volaban puerta por puerta para recibir las noticias de la semana.
Algunos estaban desayunando y otros, durmiendo, como Amy.
Luego, la joven se despertó por el tronar de las nubes y la melodía que cantaba vigorosamente su madre en el piso de abajo.

Se levantó y al segundo comenzó a cambiarse de ropa. Terminado ese momento bajó las escaleras para ver a su madre y de paso a desayunar.

— Hola, madre — Habló, mientras caminaba a la mesa.

— Hola querida, ¿Cómo dormiste? — comentó la progenitora mientras servía los platos en la mesa —. Te prepare el desayuno, come.

— Gracias — respondió algo dormida.

Posteriormente se fue a lavarse los dientes para ir de paso a estudiar.
Pasada las horas, el sol estaba por esconderse, el momento perfecto para estudiar a detalle todo sobre el periodismo, su pasión era aquello. Descubrió ese pasatiempo por su abuelo, él era empleado y muy apasionado con ello, siempre le enseñaba a Amy todo su trabajo, desde fotografiar momentos hasta investigar informacion del hecho. Mientras recordaba, tomó un periódico y empezó a hojearlo. Notó un anuncio de un trabajo que hacía saber que se buscaba una empleada para cuidar de una anciana. Le intrigó bastante y decidió desafiarse a intentarlo.

Al dia siguiente, se vistió adecuadamente para la situación, desayunó y se fue.
Llegando se encontro a la que sería la anterior cuidadora de Margareth, Lissy.

— ¡Hola, buenas tardes! — saludó Amy.

— Hola, vienes por el anuncio ¿verdad? yo me llamo Lissy, un gusto — respondió la mayor.

— El gusto es mio, ¿Puedo pasar? — preguntó la castaña, mirando dentro del hogar.

— Sí, puedes pasar.

La joven pasó casi toda la tarde allí.
Lissy le mostró todo el lugar para después presentarle a Margareth. Quien sería la que cuidaria por bastante tiempo.
Entablaron conversación hasta que llegó la hora de comer, Amy preparó una típica comida de Londres. Cosa que a margareth le encantó.

— La comida esta deliciosa Amy, muchas gracias — dijo la anciana.

— ¡Muchas gracias! Mi madre me enseñaba desde pequeña a cocinar — habló entusiasmada la chica.

— Sabes, mi nieto es bueno cocinando. A mí parecer, estan empatados, los dos hacen buena comida — exclamó Margareth riendo.

— No creo que sea mejor que yo — expresó la castaña riendo.

Cuando el almuerzo terminó,
la llevo a la cama para contarle historias de algunos libros de la biblioteca. Pasaron unos cuantos minutos y Margareth cayó en un profundo sueño.
Amy comenzó a explorar la habitacion, encontrandose con unas cartas en un cajón. Intrigada procedió a leerlas, aún sabiendo que eso no era propio de ella.

Jamás revisaría algo privado de alguien, y menos de una persona mayor. Siguió ojeando percatandose de que trataban de conversaciones que tenia con su nieto llamado William, con quién al parecer hacía tiempo no se comunicaba.

Salió de la casa pensando en aquella carta, en la cual William escribió anunciando la perdida de su madre. En el trozo de papel se lograban ver manchas de tinta, que daban a imaginar que su pulso era tembloroso mientras escribía. Sintió una gran tristeza al leerla.

Sumida en sus pensamientos, no se percató hasta cuando llegó al faro de luz que su bicicleta ya no estaba, se la habían robado. Entró en desesperación y llamó a su madre, logrando que ésta la pase a buscar.

Para la joven, hoy fue un dia poco agotador. Ella se sacó sus zapatos y fue a darse una ducha. Después, en su habitación ya cambiada, ordenó todas las fotografias que logró sacar anteriormente. Tenía un cuaderno especialmente para ello, cada foto estaba pegada cuidadosamente con una frase que a ella le parecía adecuada para esa imagen.

Rió al ver una en la que un joven se caía de su skate. Con una letra descuidada debajo de la fotografía escribió: "El suelo estaba demasiado cerca."

La cena se acercaba, la madre de Amy preparaba una típica comida tailandesa. La castaña decendía las escaleras mientras consideraba un lugar para sacar nuevas fotografias. Al terminar la comida partió hacia el baño para poder lavarse los dientes y luego descansar.












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⏰ Last updated: Jan 14 ⏰

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𝗟𝗼𝘃𝗲 𝘁𝗵𝗿𝗼𝘂𝗴𝗵 𝗹𝗲𝘁𝘁𝗲𝗿𝘀Where stories live. Discover now