No soy una roca

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Cuando me dejaste sola, aunque prometiste no hacerlo, experimente por primera vez la tristeza, siempre creí que como no demostraba mis sentimientos no los tenía, pero las lágrimas que recorren mi rostro son la prueba de que si los tengo, al levantar mi cabeza mi rostro vuelve a estar como siempre inamovible; sin embargo, gotas de la lluvia han caído sobre mí al parecer el cielo quiere recordarme todo lo que dije sobre el cliché o simplemente me ayuda a que pase desapercibida la única prueba de mi dolor.

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