La tercera noche sin ti. (En proceso)

Capitulo 1.

El autobús hacia la preparatoria avanzaba muy lento ese lunes, no iba retrasada, pero si estaba comenzando a impacientarme, así que saqué mis audífonos de la mochila y con delicadeza me los acomodé, reproducí mi canción favorita, Nasty de Russ, y dejé que el tiempo pasara.

Mirando por las ventanillas, me entró la nostalgia de aquellos primeros días de escuela, en los que todo era tan emocionante y el éxtasis se sentía en cada uno de los de nuevo ingreso; ahora, todo era diferente, éste sería mi último año y no tengo ni idea de lo que deseo hacer con mi vida, quizá sería una increíble veterinaria, o una fantástica química, incluso sería muy buena maestra de inglés, pero mi mente no daba para buscar una solución en ese momento, solo estaba esperando que todo cambiara o cayera un meteorito del espacio justo sobre mi cabeza.

Los minutos pasaron y más pronto de lo que creí el autobús se detuvo justo enfrente de la escuela preparatoria Villa de Alba, mi destino, mi infierno. Bajé con agilidad sin mirar atrás y avancé con firmeza hasta llegar a la entrada.

- ¡Hey Guapa! - Saludó con entusiasmo uno de mis mejores amigos desde el otro lado del barandal- Tanto tiempo sin verte, pero si no has cambiado nada

El chico me esperaba con los brazos abiertos y una sonrisa de oreja a oreja. Ángel y yo éramos amigos desde primer semestre, lo veía como un hermano y estoy segura de que él a mí. Claro, era un pelirrojo blanco y alto muy atractivo, pero no había imaginado jamás más allá de eso.

- ¿Qué tal Angie?- Lo abracé y de inmediato me sentí más segura- ¿Y los demás?

-Abajo, nos están esperando.

El campus en este lado de la ciudad no era tan grande como el central, pero si llevaba un poco de tiempo moverse de un lado a otro. Caminamos deprisa hasta el fondo del lugar en donde había un precioso jardín interno repleto de nuevos estudiantes ocupando las mesas disponible. En una de ellas estaba todo mi team.

Al primero que ví fué a Iván, un chico con la preciosa tez del color de la canela y cabello negro como el azabache, cejas pobladas y ojos del mismo tono, bastante alto diría yo. A su lado Tony agitaba su mano con euforia al mirar que nos acercabamos, él guardaba todos mis secretos en sus hermosos rizos.

Yair permanecía en silencio al lado, el era un chico inmenso, grandes bíceps, gran altura, pero con gran corazón y el más antisocial de todo el grupo. Adrián y Alejo jugueteaban en sus celulares junto con Lauren, los tres eran de estatura promedio, delgados y de cabello lacio, lo único diferente eran los tonos de sus cabelleras.

Zaret y yo éramos las únicas chicas del grupo, lo cuál era inusual, claro, pero con ellos encontré mi paz.

- Vaya, los dioses del Olimpo se han reunido- Dije sonriendo mientras me sentaba.

-Nena, llegaste justo a tiempo, estos hombres están volviendome loca- Zaret se veía demaciado estresada- Llevan horas hablando de coches y Pokémon.

-Bueno chicos, lamento interrumpir, pero las clases empiezan en cinco minutos y el profesor Pone no nos va ah esperar hasta que ésto se resuelva- Laurent tenía una obsesión con ser el mejor de la escuela, y eso incluía no llegar ni un minuto tarde.

Recogimos nuestras cosas y entre bromas y carcajadas fuimos hasta el Aula 4. La preparatoria era extraña, cada hora nos debíamos mover de Aula para que nuestra energía motriz se ventilara o algo por el estilo.

Entramos y nos sentamos en nuestros lugares habituales, adelante del aula y en el centro, excepto yo, tenía lugar adelante del escritorio del profesor, el cual estaba posicionado en la esquina izquierda, justo en frente de la puerta.

Pocos minutos después apareció el profesor Ponce, maestro de estadística y un excelente programador, pero no venía solo, justo detrás de él un chico alto de cabello rizado con una gran cicatriz en la ceja venís escoltandolo, no pude evitar la curiosidad y lo miré excesivamente sorprendida cuando de pronto, si mirada encontró la mía, mis ojos miel se fundieron con esos ojos verdes y fué ahí cuando supe lo que pasaría, fué justo en ese momento cuando mi mundo dió un vuelco y mi corazón empezó a palpitar con velocidad y solo pude pensar en algo..

Ése chico iba a terminar destruyendome.