"𝘪 𝘬𝘯𝘦𝘸 𝘪𝘵 𝘸𝘩𝘦𝘯 𝘪 𝘧𝘪𝘳𝘴𝘵 𝘳𝘦𝘢𝘥 𝘺𝘰𝘶𝘳 𝘭𝘪𝘱𝘴, 𝘰𝘯𝘭𝘺 𝘢𝘯𝘨𝘦𝘭𝘴 𝘴𝘱𝘦𝘢𝘬 𝘭𝘪𝘬𝘦 𝘵𝘩𝘪𝘴."
Alexis y Angélica. Dos almas destinadas a cruzarse, se encuentran en la bulliciosa cafetería de un aeropuerto en Londres, donde...
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I. ¿En qué momento?
Los pasados días en Los Ángeles fueron sumamente reconfortantes para nosotros y con navidad a la vuelta de la esquina la ciudad se tiñó de blanco gracias a la nieve que ya comenzaba a hacerse presente.
Mi misión más grande del mes era ayudar a Alex a construir recuerdos lindos para cambiar su sentir respecto a estas épocas y que así pudiera disfrutar las fiestas. He de decir que puso mucho de su parte y se mostró dispuesto a participar en todos los planes que yo le proponía pues de cualquier forma le entusiasmaba estar conmigo. Nos unimos a una competencia de muñecos de nieve y también visitamos el bazar navideño donde probamos algunos postres y compramos pijamas a juego.
Vimos el Expreso Polar ya que esa era la única película navideña que él toleraba —para ser honesta creo que yo también— y construimos casitas de jengibre, aquella actividad fue un fracaso pero al menos pudimos comernos el frosting.
En un día de locura Alex me habló sobre sus ganas de querer tatuarse y yo como fanática de la tinta me apunté al plan de inmediato. Cada uno hizo elección de su diseño de forma individual y poco antes de comenzar nos dimos cuenta de que habíamos tenido la misma idea, cosa que nos causó mucha gracia e hizo el momento aún más especial. Habíamos acordado que el detalle se quedaría entre nosotros, pero gracias a nuestras dos neuronas terminamos entregando la exclusiva a las comunidades en bandeja de plata.
