3. ❦︎𝑁𝑒𝑣𝑒𝑟𝑙𝑎𝑛𝑑❦︎

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Una brusca sacudida me despertó de mi lindo sueño, abrí los ojos intentando clarificar mi vista enfocando la mirada en los ojos verdes del causante de que me despertara

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Una brusca sacudida me despertó de mi lindo sueño, abrí los ojos intentando clarificar mi vista enfocando la mirada en los ojos verdes del causante de que me despertara.

— No piensas despertarte? Ya es tarde.

— Deja de joder, tengo sueño.

— Que mal, pero arriba.

Y con eso agarró fuertemente mi cabello haciendo que me levante por el dolor.

— Que te pasa?!

— Dije que te despiertes y no querías, entonces tuve que agarrar tu horrible cabello para que te levantes de la cama. Pareces una foca ahí tirada y con ese nido de pájaros en el cabello.

— Puedes dejarme en paz?

— No.

— Dios! No te conozco y ya te odio!

— Crees que me importa? De todos modos estarás toda una eternidad conmigo y mis muchachos. Si es que no te mato primero...

— ¿Podrías irte? No soporto ver más tu rostro.

— Tranquila, yo tampoco soporto ver el tuyo.

— ¿Entonces que mierda haces aquí?

— 1: Es mi cabaña y yo puedo estar aquí el tiempo que quiera. 2: Perdiendo el tiempo hasta que esté el desayuno.

- Bueno, pues ve a perder el tiempo en otro lado lejos de aquí.

— Bien, pero no tardes.

— No, ya vete.

Me dedico una sonrisa socarrona antes de irse, dios! Como lo odio y también a su estúpido y jodido egocentrismo... Este tipo es insoportable.

Me levante de la cama y no tenía nada que ponerme, fui al armario que estaba ahí y claramente era pura ropa de hombre. Saqué una playera verde oscura lo suficientemente grande como para que tapara al menos mis muslos, luego agarré un cinturón de Pan y lo ajuste a mi cintura... Me veía muy bien la verdad. Cepille un poco mi cabello y lo dejé suelto, fui hasta el baño y lavé mi cara y mis dientes... Todo muy normal la verdad.

Salí de la cabaña de Pan y me encontré con un chico de cabello pelirrojo y pecas, era muy tierno la verdad...

— Hola! Em... No sabes dónde está Pan?

— Hola, sí. Estaba con Felix allí cerca de la fogata.

— Gracias!

Me fui y allí estaban los susodichos... El rubio oxigenado y el castaño arrogante. Me acerqué a ellos ya que quería pedirle algo a Pan.

Te Encontré, Duquesa.↬Peter Pan (OUAT) y tú.↫Where stories live. Discover now