Parte única

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Se rumoreaba, se afirmaba y se decía en los salones donde la banalidad de las conversaciones prevalecía, que Yoongi estaba sumido en la locura. Pero él, como individuo con discernimiento propio acerca de cómo se presenta a los demás, no se consideraba una persona insana, era, más bien, alguien sin relación alguna con la definición de "loco". En sí, el sujeto se trataba de un ser tranquilo, de pocas palabras. Lo único que podía atribuirse a su "locura" era el hecho de perderse en la soledad y no dirigir palabra alguna a nadie, lo cual podía llevar a pensar en algún rasgo relacionado con el autismo. Sin embargo, más allá de eso, continuaba con su vida de manera normal. Un ser humano como cualquier otro, con sus propias ideas y peculiaridades que podían desfigurar nuestro currículum como seres humanos corrientes. Yoongi festejaba en secreto a aquellos que se encontraban fuera de lo común, que brillaban con luz propia, desafiando la corriente que arrastra a los peces como el salmón, contracorriente en los ríos. Pero nadie podía estar dentro del espectro de la normalidad cuando el exceso de imaginación, amor propio, de cualquier aspecto del ser humano al sentir se convertía en locura.

Desde pequeño, Yoongi se mantenía inexpresivo, le costaba adaptarse a situaciones sociales en las cuales la conversación era crucial. Esa era su "locura", ser un observador, un engranaje que no encajaba completamente en la sociedad, alguien que no formaba parte de nada. En su adolescencia, se cuestionaba de vez en cuando cuál era su lugar en el mundo y por qué resultaba tan inexpresivo, por qué no podía cambiar eso. Lo intentó, pero solo lograba esbozar una sonrisa incómoda que intentaba ser genuina, pero no podía serlo, sus gestos pasaban desapercibidos.

La falta de familiares y amigos lo convirtieron en una persona solitaria, vagando por calles llenas de individuos centrados en sus propias vidas. Muchas veces temía ser objeto de burla, sentía ansiedad al caminar, al realizar cualquier acción que pudiera generar una reacción mofante de parte de los demás. Pero con el tiempo, se dio cuenta de que la realidad era que cada quien estaba centrado en su propio mundo, al igual que él en el suyo, y pocos eran los observadores dispuestos a burlarse. Con ello dejó la ansiedad de lado y cuando en verdad se encontraba una excusa para reír de la acción torpe de un ajeno, no le importaba para nada. Puesto que se dio cuenta de que la burla siempre es fugaz, pronto olvidado y sin mayores consecuencias.

Por eso enamorarse resultaba muy difícil para una personalidad como Yoongi, no porque le costara enamorarse, sino porque amar le era complicado. Porque enamorarse se limitaba al simple hecho de ver a otra persona de una manera especial, pero amar significaba una entrega, darle a tu ser amado. Y Yoongi carecía de expresividad. 

Tenía claro lo que le atraían de las personas: alguien que no pudiera intimidarlo, con una mirada dulce y cabello suave, alguien de estatura similar a la suya, ni demasiado alto ni demasiado bajo. Le gustaban aquellos que pasaban desapercibidos, que no destacaban entre la multitud, personas a las que sólo él notaría. No le agradaban aquellos que resplandecían ante los demás por su belleza o rasgos exóticos, aquellos que se ajustaban a los estándares idealizados de la industria de la belleza. A Yoongi le encantaban los ojos oscuros, el cabello negro y alguien de estatura promedio, alguien como él pero con una sonrisa que transmitiera empatía, alguien que no se asustara por su expresión seria y ausente. Y encontró a ese alguien en Jimin. 

En lo más profundo de su esencia, pudo sentir la enigmática magia que se despliega en cada uno de sus movimientos. No existe otro amante en el vasto universo capaz de atraerlo de la misma forma hipnótica. Cada gesto, cada mirada cautivó su ser, envolviéndolo en un hechizo del que no desea liberarse. El tiempo puede avanzar sin cesar y las tormentas pueden azotar impetuosas su corazón, pero Yoongi jamás permitirá que Jimin se aleje de su vida. Su presencia está arraigada tan profundamente dentro de él que escapa a toda comprensión humana, trascendiendo los límites de lo posible.

SALÓN DE LOS RUMORES 噂 YOONMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora