Lunes 13 de Noviembre de 2023.
*Narra Gavi*
Me desperté a las 10:00. Pedri aún seguía durmiendo. Me levanté con una especie de picor en la espalda, pero no le eché importancia. Me puse a hacer la maleta.
¿Qué decir? Que Pedri no estuviese convocado era un alivio para mi porqué así se podría recuperar del todo de la lesión, pero también me fastidiaba porqué no podía estar con él. ¿Y que es lo más cerca de él que podría estar? Con su ropa. Abrí el armario y cogí más ropa de Pedri que mía.
Cuando acabé de hacer la maleta aún me seguía picando la espalda así que decidí irme a duchar. Cuando llegué al baño, me quité la camiseta y vi el reflejo de mi espalda no creía que me iba a encontrar con eso.
Tenía un montón de arañazos por toda la espalda y alguno que otro en el abdomen.
No recuerdo moverme por la noche, así que no sé cómo llegaron a mí espalda.
*Narra Pedri*
Cuando me desperté vi la luz del baño encendida. Me levanté y al entrar al baño vi la espalda de Gavi.
Pedri: ¿Y eso?
Gavi: Ni idea
Pedri: Parece que te hayas peleado con un oso *le toqué los arañazos*
Gavi: A, que duele
Pedri: Perdón
Gavi: No sé cómo me lo he hecho
Me puse a recordar.
Pedri: Perdón
Gavi: ¿Por?
Pedri: Ayer en nuestra noche de pasión pues te clavé las uñas y tal, lo siento
Gavi: Ostia, pues no me enteré
Pedri: Estabas muy concentrado
Gavi: Para que te gustase
Pedri: Me encantó *le dí un beso*
Gavi: Bueno, pues a ver cuánto me dura esto, me voy a duchar
Pedri: Pues yo voy a hacer el desayuno
Gavi: Vale
Nos dimos un beso, Gavi se fue a duchar y yo a hacer el desayuno.
*Narra Gavi*
El agua y el jabón me estaban matando cuando rozaban los arañazos. Me escocia.
Cuando bajé a la cocina Pedri ya tenía el desayuno en la mesa. Nos pusimos a desayunar.
Pedri: ¿Qué tal la ducha?
Gavi: Pff, no veas cómo escuece
Pedri: Luego te puedo echar un poco de crema
Gavi: Si, por favor
Cuando acabamos de desayunar fuimos a pasear a Bimbo y al volver me tumbé en la cama boca abajo para que Pedri me pudiese echar crema.
*Narra Pedri*
Gavi se tumbó en la cama boca abajo, me senté encima suyo con cuidado, una vez encima de él, abrí el bote de crema y me eché un poco en la mano.
Pedri: Está un poco fría
Gavi: Vale
Me la esparcí por las manos y se las puse con cuidado en la espalda.
Gavi: Joder
Pedri: Perdón
Gavi: Sigue, sigue
Empecé a esparcir la crema por la espalda de Gavi. De vez en cuando soltaba algún quejido.
