10. Huella

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Gisele se había colocado un bikini al igual que Brina, cubriéndose está con un cárdigan ligero

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Gisele se había colocado un bikini al igual que Brina, cubriéndose está con un cárdigan ligero.

— Veo seis guardaespaldas — habló Han mirando en otra dirección.

— Siete — respondieron Brina y Gisele.

— ¿Crees que el tipo de la mochila es un turista? — cuestionó Gisele.

Brina miró al chico, robó un poco de cacahuates que tenía Han.

— ¿Cuánto estuviste en el ejercito? — preguntó Han hacia Gisele. — El arma que sacaste el otro día era una Jerico 941. La forma en cómo deslizaste el pulgar eso es del Mossad.

Brina puso su barbilla sobre su mano. Era el momento de contarse los más oscuros secretos.

— Deje la milicia más o menos cuánto tú dejaste de fumar — respondió Gisele hacia Han.

Brina también había notado ese hábito en Han, tal vez era por eso que cada que salía le termina llevando algunas papas.

— Por la cantidad de papas que comes — continuó Gisele. — La forma en que siempre tienes la boca y las manos ocupadas, apuesto a que fumabas dos paquetes diarios — Gisele miró a Han. — Y sin filtro.

Brina se sentía en medio de una situación romántica, era el mal tercio.

— Esto es inútil — hablo Han cambiando el tema. — No podremos conseguir sus huellas aquí. Hay que hacer más vigilancia, llamar a alguien más.

Gisele y Brina compartieron una mirada juguetona.

— O — Gisele le sonrió a Brina. — Un hombre no puede hacer el trabajo de una mujer. ¿Vienes Brina?

— Creo que si vamos las dos, él no sabrá a quien elegir — respondió Brina. — Mejor ve tú, mi linda Gisele.

Gisele le guiñó un ojo, se quitó la tela que cubría su bikini para alejarse de ellos.

Tanto Han como Brina miraron como Gisele se acerca hasta el área donde Reyes se encontraba.

La mujer Yashar habló con uno de los de seguridad que la detuvieron para que no entra, Reyes le indicó que la dejara pasar.

Gisele miró hacia donde se encontraba Han y Brina, la última le guiñó el ojo.

Miraron como al principio Reyes colocaba su mano en la espalda de Gisele  y de a poco fue bajándola hasta su calzón.

Han y Brina se miraron entre ellos sin chocar los puños.







































Han y Brina comenzaron a caminar por el alrededor de la playa. Se alejaron de donde Gisele.

— ¿Cuál es tu historia? — cuestionó Han.

— ¿La mía? — respondió Brina con otra pregunta. — Creí que no teníamos que hacer esto.

Brina se detuvo para quitarse las sandalias tocando con sus pies la arena.

Han camino junto a ella. Veía como ella sonreía al sentir la arena en sus pies, algo tan simple como ese gesto la hacía feliz.

La hacía sonreír. Una sonrisa diferente a la que ella tenía cuando estaba junto a Roman y Tej, incluso junto a Mia y Dom.

La sonrisa en su rostro era como si se permitiera ser libre.

—  Oh vamos Brina — insistió Han. — He visto como discutes con Brian todo el tiempo.

— Brian intenta protegerme, pero él no entiende el dolor que estoy sintiendo — suspiró. — No entiende lo que se siente perder a tu esposo.

Han se sorprendió al escucharla. ¿Brina estuvo casada?

— Por la expresión en tu rostro se que no esperabas esa respuesta — murmuró Brina. — Me case hace unos seis años. Él era doctor y créeme que fue extraña la manera en que nos conocimos, yo tenía una herida de una bala y él fue quien me atendió. Amor a primera bala.

Han rio ante la broma. Podía ver en sus ojos como se sentía mal, como hablar de su viejo amor le dolía, pero también él como quería sacar su dolor.

— Hace un año mi pesadilla comenzó. — empezó a explicar Brina. — Brian y yo queríamos detener a un traficante, y Tommy se ofreció para ayudarlos, le insistí que era peligroso, que no debía hacerlo, se estaba arriesgando demasiado y podía salir herido, el que fuera un doctor no lo salvaba todo el tiempo. Él insistió en que lo haría, ayudaría a que Dominic regresara a casa que todo volvería a ser como antes, pero ellos lo descubrieron. — suspiró cerrando sus ojos recordando esa noche, la noche en que Tommy murió. Se detuvo para ver el mar, Han se colocó a su lado. — Fue mi culpa, ese día discutimos, y peleamos por que yo no quería que fuera, tenía un mal presentimiento. Él prometió volver, no fui a la misión para cuidarlo, me encerré en casa para dormir, siempre hacia eso y él regresaba cada noche para abrazarme y darme un beso en la frente, esa noche no sucedió. Brian me llamo y me dio la noticia. Fue mi culpa, Han.

Los ojos de Brina tenían lágrimas que deseaba derramar, parpadeó un pr de veces intentando que se esfumaran.

Han se acercó a ella para que retirar la lágrima que resbaló por su mejilla.

— No fue tu culpa, Brina — hablo Han. — Tu no sabía que eso sucedería, no sabías que eso iba a pasar. — la tomó de la mano. — Te lo repetiré cada día hasta que entiendas que no fue tu culpa, Brina.

— Debí estar allí, Han, debí protegerlo.

Han no le respondió, se acercó a ella con cuidado de que no se alejara. Al ver que ella no se movió puso su mano sobre su hombro dándole un apretón.

Era la primera vez que Brina hablaba de Tommy, sabía que las heridas llevaban un proceso de sanacion, y estaba terminando el suyo, el tiempo estaba comenzando a cerrar la herida.



































NOTA DE AUTOR:

¿Qué tal? Espero les esté agradando el fic.

Es la primera vez que se menciona quien es Tommy y él como murió, y si se lo preguntan, si Tommy murió debido a Braga.

La meta será 30 votos y 15 comentarios, no cuentan los puntos o emojis.

Me despido hasta un nuevo capítulo <3

GANGSTA'S PARADISE; Han Lue Where stories live. Discover now