La muñeca de Fox

(RE) Sospechas

Narrador: Ay la primavera, una época llena de felicidad y regocijo. Las flores comienzan a florecer, las parejas se juntan y el amor está por dónde sea. Y en la (secundaria-preparatoria) Fazbear era bien sabido por todos que el festival de primavera era uno de los más importantes, pues es tradición que muchas de las parejas que duran se conocen durante este. 

Una época muy feliz para todos, excepto para un chico alto, de cabello rojo y ojos ámbar; Foxy siempre ha sido un chico impulsivo y agresivo, no era raro escuchar su nombre por los altavoces de la escuela, sin embargo este día había cruzado la línea.

Los guardias privados de la escuela lo tomaron por la fuerza para quitarlo de encima de Golden, el joven de oro tenía moretones en su rostro debido a los golpes de Fox, más no parecía estar enfadado, su rostro reflejaba una mirada de pena mientras se llevaban a su amigo.

Mientras tanto, una chica de ojos ámbar y cabello blanco con un mechón rosa. Estaba tranquilamente paseando por el patio de la escuela, ella se encontraba pensativa, como si no estuviera ahí, pero fue la voz de una de los guardias la que la sacó de su trance.

Guardia: Señorita Mangle, lamento molestarla. Pero necesitamos que venga con nosotros, es la única que aparece como contacto de emergencia del joven Foxy.

Mangle/Meg: ¡¿Está herido?!

Guardia: No, no.  Estuvo involucrado en una pelea, pero me temo que fue más violento que de costumbre...

Meg: D-de acuerdo, voy [Hay Fox en que te metiste...]

La guardia y Mangle caminaron por el campus hasta llegar a la sala de castigos. La puerta era metal y tenía una ventana con una malla. Algo exagerado tal vez, pero con los jóvenes de hoy en día ya no se sabe.

Guardia: Espero puedas hablar con él, la directora está hablando con el chico que golpeó, si los padres lo consideran oportuno... tendrán que expulsarlo. 

Meg: Gracias, espero no lleguemos a eso... Por cierto, ¿Foxy no la lastimó?

Guardia: ¿A mí? Gracias por preocuparte, pero no me pasó nada. Ahora sí me disculpas tengo que ir a mi puesto, ah y una vez termines de hablar con él mándalo a la sala de dirección por favor

La guardia de seguridad se fue, dejando sola a Mangle frente a la puerta del salón de castigos, la chica dudó un poco antes de entrar, no obstante respiró profundamente antes de adentrarse. Una vez dentro fue recibida por la imagen de Foxy sentado y cabizbajo la esquina del cuarto; delante de él se hallaban unos cuantos pupitres más y hasta el frente una pizarra verde. 

Mangle se encontraba a un lado de la pizarra, se quedó en silencio unos segundos observando a Foxy, el chico no se había ni percatado de su presencia. Finalmente, Mangle decidió acercarse hasta dónde estaba sentado su amigo.

Meg: ¿F-Fox?

Mangle trató de llamar la atención de Foxy, sin embargo esté solo balbuceo unas palabras mientras mantenía la mirada hacía el suelo.

Fox: perdón, perdónenme...

Mangle: ¿Fox?

Fox: ¿¡Qué quieres!?

Mangle: ¿¡Cómo que qué quiero!?, ¡quiero que me expliques que rayos te pasa!

Foxy: ...

Mangle: Rojo, no sé que te ha pasado últimamente ¡Pero definitivamente no eres el Fox que fue mi baterista!

Foxy: No sé de que me hablas

Dijo Foxy fijando sus ojos en ella, sin embargo. Sus ojos no eran de ese usual color ámbar que emitían calidez, por el contrario, eran unos ojos grises y vacíos.