Enlazando al destino.

Capítulo 9

Buggy había terminado rendido ante el pecaminoso encuentro, quedando dormido en el pecho de Crocodile, esperando a que bajara el nudo. Acarició suavemente los cabellos azules. Había visto al payaso en Impel Down, nunca pensó que terminaría en una situación así, menos por qué cuando abordaron juntos el barco que robaron a la marina, nunca llegó algún olor. Simplemente era alguien ruidoso y patético, pero el payaso escondía secretos que ese día salieron a la luz. Un idiota como él, estaba en la tripulación del Rey de los Piratas, y posiblemente no por ser un payaso.

Pudo notar el reencuentro de Shanks y Buggy, hubo una tensa atmósfera que nunca pudo entender, hasta ahora. El pelirrojo había ocupado feromonas para que el payaso pasará desapercibido, pero el Buggy era estúpido por qué no se habia percatado del asunto. Tenía noción de la relación de esos dos pero no sabía si Buggy sentía algo más que una hermandad ante el otro. Pero estaba seguro que Buggy nunca le pediría ayuda al pelirrojo, no era ajeno a la personalidad de este para saber qué Buggy odiaba ocupar su estrecha relación con Shanks para librarse de algo, o tal vez sí. Tendría que averiguarlo.

Se apresuró a bajar el cuerpo del presidente para acomodarlo en el sofá. Buscó sus prendas para vestirse, llegando a la habitación se limpiaría y al otro también.

Si lo dejaba aquí, era probable que algún borracho de la fiesta de abajo, cayera ante el encanto del presidente. Su molestia se disparó rápidamente, su juguete era únicamente de él y de nadie más, arregló lo último de su ropa, para cargar a Buggy con su mano, tenía un peso ligero, posiblemente al mantener su cuerpo en forma, las rutinas de circo, eso también explicaría su flexibilidad.

Tapó el cuerpo desnudo con su propia gabardina negra de piel, caminando rumbo a su habitación. Pero fue su sorpresa ver a Mihawk recargando en una de las paredes de los largos pasillos del recinto.

Si te viera Shanks, posiblemente estaríamos en guerra.

Pero no está, al menos que hables.

No tengo por qué, es interesante ver hasta dónde llegarás con tu circo.

Tengo que aprovechar al payaso, la humillación le queda tan bien.

Me sorprende que hayas aceptado tan rápido, podría decirse que estás encantado con el mocoso.

¿Celoso, Mihawk?

No, para nada. No quiero nada que haya tocado Shanks.

Crocodile, mostró una leve mueca en los labios de molestia, si eso era cierto, lo de Impel Down no era una coincidencia, pero Buggy estaba completamente seguro de que era Beta.

No pienses tanto, solo deja algo para los demás, al final aquí todos somos uno solo, ese es el motivo principal del gremio ¿No?

Entonces encárgate de conseguir anticonceptivos, por qué no queremos sorpresas. Eso, si es que quieres entretenerte con él.

Se apartó con Buggy en brazos, tomando su rumbo inicial a su habitación. Mihawk era callado pero particularmente estos días había estado bastante conversador. Algo se intuía el espadachín, así que estaría alerta a cualquier movimiento extra.

Con un suave movimiento de hombro, abrió la puerta de su dormitorio, cerrándose a su paso, colocó a presidente en la cama, y este ni se había inmutado en todo el camino, tenía la piel ligeramente sonrojada y los leves ronquidos era su única señal de vida.

Buscó un par de toallas y un cubo de agua, ya había limpiado a Buggy la vez anterior, así que ahora no tendría por qué tardar tanto, pero ese suave olor a lavanda inundaba sus fosas nasales, haciendo reaccionar nuevamente su cuerpo, dejó las cosas botadas en el piso, acomodando sobre el emperador, deleitando sus ojos con cada movimiento lento de su pecho, subiendo y bajando, su cabello desordenado en la cama, brillando sobre las suaves sábanas de seda. Sus labios rojos e hinchados, dándole una invitación a poseerlo nuevamente.

Si esto seguía así, dudaba mucho que su autocontrol y su tan posesivo instinto empezarán a formar la idea de marcarlo. Pero, si quería seguir en pie con el gremio, tendría que marcarlo al final, siendo este su pase de salida de cualquier problema.

Pero por ahora, volvería a disfrutar del celo, ya después tendría tiempo para pensar en sus futuros planes.

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Mihawk no era alguien de órdenes, pero sería divertido aprovechar jugar un poco con el payaso, posiblemente ahora con la búsqueda del One Piece estarían en la mira del pelirrojo. Ese maldito imbécil, su cólera crecía, nunca podían disfrutar de un agradable momento sin que tuviera que mencionar a su queridísimo amigo de la infancia. Buggy esto, Buggy lo otro, Buggy es mejor haciendo, bla bla bla.

Su cabeza empezaba a doler, pero su corazón estaba resentido. Shanks no podía anhelar algo más con nadie que no fuera el payaso. Y a pesar de lo increíble que sonara Buggy no coincidía con los sentimientos de Pelirrojo. En la guerra que se desató después de la masiva fuga de Impel Down, pudo asegurar que Buggy era indiferente a los sentimientos del pelirrojo, el payaso tenía ciertas habilidades para intuir cosas turbias pero en lo personal era un desastre.

Se encargaría del pedido de Crocodile, pero también buscaría la manera de cobrar por sus honorarios. Al final podía ocupar esto para provocar un poco a Shanks, y tal vez podría divertirse un poco en ese lío.

Aún no acababa el día, así que tenía suficiente tiempo para revisar algunos de sus próximos movimientos, tal vez podría comunicarse con el pelirrojo, tal vez.

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Buggy despertó al sentir un peso extra encima suyo, estaba cansado, pero sentía un reconfortante calor, bastante agradable.

Así que, ¿Te gustó?

El peliazul, abrió exageradamente los ojos al notar la posición tan romántica que tenía con su comandante, separó su cuerpo para apuntarlo acusadoramente.

¡Eres un imbécil! Aunque me ordenaras a decirlo, fue desagradable.

¿Seguro?, por qué yo escuché todo lo contrario.

Crocodile sonrió, buscando el puro en la mesita de noche, para volver a mirar al otro, con la cara roja de vergüenza.

Pero antes de seguir con nuestra plática, deberías de vestir algo, no creo que sea lo correcto que tus súbditos te vean marcado como una pequeña zorra.

¡Tú! Eres el responsable de ello, así que no finjas inocencia. ¡Idiota!

Buggy grito con rabia, si algo era seguro es que en la forma de tratar a Crocodile nunca cambiaría por mucho que aliviaría sus futuros celos. Nunca le daría el gusto de la razón.

Yo solo ayudo al aclamado presidente. Entre nosotros debemos apoyarnos en todo. ¿No lo crees?

Un escalofrío le recorrió en todo el cuerpo, podía asegurar que el más alto estaba dando dobles intenciones con esa frase.

Agarró una sábana para cubrir su cuerpo desnudo, su ropa había quedado hace un par de horas en el balcón. Necesita salir de ahí, pero tampoco era digno de él que su gente lo viera en esa humillante situación. Per se arriesgaría, no quería seguir viendo al estúpido de Crocodile y su sonrisa victoriosa.

Solo lo dices por qué te conviene, me largo de aquí. ¡imbécil!.

Envolvió bien su cuerpo en aquella suave sábana, murmurando una sarta de maldiciones, el más alto sabía muy bien sacarlo de sus casillas. Su cuerpo repentinamente perdió fuerza, nuevamente sentía un calor en su interior no tan fuerte pero algo como para distraerlo un par de segundos. Crocodile se había disparado a su lado nuevamente, para jalarlo a la cama. Esto estaba lejos de terminar, pero muy en el fondo sabía que lo disfrutaría. Nada parecido a la primera vez. Crocodile era un poco más amable, de igual manera no se confiaría de ello.

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Mi plan inicial era actualizar una ve cada semana o cada quince pero me llegó la inspiración gracias a una amiga y quiero seguir escribiendo más y más, habrá algunos dramas más adelante pero les aseguro que cambiaría.
Cierto, posiblemente cambie de plataforma, aún no estoy segura pero en dado caso lo haré saber. Gracias a todos por sus bonitos comentarios me ayudan bastante 😽